Yoli Claramonte ha vuelto a Mtmad con las pilas cargadas y dispuesta a zanjar uno de los temas que más daño le han causado desde que salió del reality de Mediaset: "Por fin vamos a hablar con propiedad, con papeles y abogados de por medio, y con sentencias que reafirman lo que yo hice en su día", empezaba diciendo Yoli en su vídeo, en el que ha podido demostrar que la ropa que vendía no procedía de Aliexpress, sino de un firma de dropshipping española.
Según la influencer, muchas más compañeras trabajan con esta marca, "pero a mí me tocó pagar el pato", ha dicho. "Para nada he comprado ni he revendido ropa de Aliexpress, pero no es que lo diga yo, lo dicen las sentencias judiciales que lo demuestran y me dan la razón para finiquitar este tema tan polémico", aseguraba. Yoli Claramonte ha apuntado también a que las compras de cualquier tienda de barrio también pueden ser de Aliexpress, ya que la mercancía procede de grandes almacenes de ropa fabricada en China.
La instagramer está cansada de que se critique cada una de sus acciones: "Solo quiero que estéis completamente seguros de que la información que vertéis sobre mí sea cierta, porque si no lo es, mis abogados harán su trabajo, que es lo que tienen que hacer", aseguraba. "Las sentencias demuestran que yo no he hecho nada ilegal, todo es lícito. A todas las personas que vertieron informaciones falsas sobre mí y que deterioraron mi imagen les puse la demanda correspondiente", revelaba.
Frustrada por el éxito de otras compañeras
Claramonte ha asegurado que algunas de sus compañeras siguen trabajando con esta marca, pero que ella tuvo que cerrar su negocio, que según apunta le habría funcionado bastante bien en el escaso mes en el que pudo trabajar. "Estoy hasta las narices de que se me acuse sin saber. Cuando se me volvió a acusar de hacer algo ilícito, pedí que se retirara ese comentario y mis abogados se pusieron en contacto con esa persona para mostrarle la documentación que demostraba que lo que decía no era cierto y finalmente se retractó", ha añadido.
Sobre los motivos por los que no ha querido hablar del tema hasta ahora, Yoli Claramonte ha asegurado que en su día se sintió muy mal, especialmente por la presión psicológica y la falta de comprensión por parte de la gente. Ha dicho que en el pasado, cada vez que alguien hablaba sobre este tema, se sentía humillada, pero ahora lo ve como algo normal y comprensible: "Vergüenza las personas que se han equivocado y ahora tienen que esconderse para leer las sentencias".
"Hay gente que lo sigue haciendo y yo no puedo. No sé de dónde sacarán determinadas influencers la ropa o las joyas, pero no creo que se hayan montado una fábrica de joyas en su casa", ha añadido en referencia a los negocios de otras famosas. "Sigo con mis negocios, pero mostrando cada parte del proceso para que no se me pueda volver a acusar de que la ropa sea de Aliexpress. Yo soy una emprendedora nata y no se me pasa por la cabeza dejar mis negocios", ha continuado.
"Hay gente que quiere que desaparezca de aquí, pero no", ha dicho Claramonte apuntando a una supuesta mano negra que solo busca perjudicarla. "Si yo hablara de lo que sé, madre mía, porque han pasado muchas cosas de hace años hasta ahora, ardería Troya", advirtió señalando que solo habla cuando tiene las cosas del todo seguras. "Llevaba mucho tiempo amordazada y era el momento de hablar con la verdad", concluía.