La vida ha dado muchos palos a Willy Bárcenas y sobre ellos abierto en canal en una entrevista concedida a Jesús Vázquez. Desde el principio de su carrera profesional fue consciente de que su apellido iba a ser en cierto modo un lastre para labrarse un camino en el mundo de la música, no obstante, en todo momento ha sabido reponerse y afrontar cada momento con optimismo.
Una de las etapas más duras de su vida llego cuando su padre, Luis Bárcenas, entro en prisión en el año 2013. Pues en ese momento cuando Willy Bárcenas decidió poner tierra de por medio y trasladarse a Chile para alejarse del foco mediático y vivir en un lugar donde nadie le conociese. Como en este país las cosas no le fueron demasiado bien decidió regresar a España para encontrar trabajo y de ello ha dicho: "Fue la mejor decisión de mi vida".
Cuando regresó fue cuando conoció a sus compañeros de su grupo musical, y ahí empezó un sueño: "Les enseñé las canciones que había compuesto y nació Taburete", y en medio de todo ello ha tenido que lidiar con las críticas que ha recibido por ser hijo de quien es: "Cuando nace Taburete mi padre está en la cárcel, todas las cuentas están paradas. La amiga de la madre de uno de los del grupo nos hace un préstamo de 2.000 euros".
En cuanto a su lado más personal ha contado como vivió los 12 años que duró el juicio hasta que su padre fue condenado: "Es algo muy duro con lo que me he acostumbrado a vivir. La cárcel forma parte de mi vida. Son años yendo a ver a mi padre y ahora a mi madre".
Feliz con lo que tiene
Pero aunque su vida no sé a lo fácil que le gustaría, intenta no envolverse por el drama: "Trabajo de lo que me gusta, tengo mis amigos de siempre, mi novia que es maravillosa... t engo tantas cosas muy buenas que no van a poder con lo otro". Y esta es la reflexión que ha dejado centrándose en lo que para él es verdaderamente importante.