La televisiva ha contado en su canal de Mtmad qué se ha comprado y no ha usado o qué le pasó con unas botas de lujo.
Violeta Mangriñán se ha abierto en canal en Mtmad para contar de algunas de sus manÃas de como es su convivencia con Fabio o de sus despilfarros económicos en lo que se refiere a la moda. La televisiva también ha contado su admiración por Ylenia Padilla con la que se siente a veces muy identificada.
A través de su cuenta de Instagram se puede apreciar lo que le gusta usar ropa de firma y estar vinculada a grandes marcas. Seguidores se habÃa preguntado por algo caro que se habÃa comprado y que nunca habÃa llegado a estrenar y parece que sà que existe una respuesta a esto. "Me regaló una amiga mÃa unas botas de una firma muy cara, Louis Vuitton, fui a cambiarlas y me compré unas un poquito más caras que me gustaban, me las probé y nunca me las he podido poner porque duelen lo que no está escrito", ha dicho. Y para colmo se tuvo que quedar con dichas gotas porque ya las habÃas estrenado: "No es que me lo haya comprado y no lo haya usado porque no me ha salido de ahÃ, sino que... son imponibles. A mà me duele mucho. Yo veo que hay gente que se las pone, pero a mà me duelen una barbaridad. Y claro... como ya me las probé y salà a la calle, caminé 100 metros con ellas..., pues ya no me iban a devolver el dinero, entonces me las he tenido que quedar".
Además, y como buen adicta a la moda, a veces ha comprado prendas que me ha llegado a estrenar, aunque ha matizado que suelen ser más bien prendas baratas. "No me compro las cosas y no las uso... A ver... sà tengo muchas cosas con la etiqueta, pero si me gasto una pasta es porque lo voy a usar. Las cosas que tienen etiquetas son prendas, de trapitos que me he comprado en rebajas que al final nunca me he puesto, pero si me gasto pasta en una prenda... me la planto", ha añadido. Habla sin tapujos
Estás revelaciones han llegado poco después de que además también se abriese en canal hablando de cuáles habÃan sido sus retoques estéticos, y de esta manera ha vuelto a demostrar que no me importa ser criticada ni por lo que derrochan y por lo que hace con su cuerpo.