Ernesto Neyra ha visitado el plató de 'Viva la vida' para hablar sobre las denuncias por malos tratos que dos de sus parejas interpusieron contra él y de cómo le ha afectado la imagen que la prensa ha difundido de él en los últimos años. Tras verse las caras la semana pasada con Kiko Matamoros en los juzgados, ahora Neyra quiere defender su inocencia.
El bailarín ha querido dejar claro que una de las denuncias por maltrato, la de Carmina Ordoñez, fue desestimada y con la segunda interpuesta por Lely Céspedes, madre de sus tres hijos, fue absuelto. Además, ha confesado que la mala imagen que los medios han dado de él le va a perseguir para toda la vida y que el único error que cometió fue enamorarse de una persona famosa.
Neyra también ha hablado sobre cómo vivió todo este asunto su madre, que falleció hace cuatro años. "Mi madre sufrió mucho con las acusaciones", reconoce el bailarín. Su familia es muy conocida en Sevilla y sufrieron los daños colaterales de todo aquello: "Me destrozaron la vida, tuve que irme a México para ganarme la vida".
Tenso enfrentamiento con los colaboradores
Durante su entrevista con los colaboradores, Paloma García-Pelayo ha vivido un tenso encontronazo con el artista. García-Pelayo ha expresado su opinión sobre los malos tratos de los que el bailarín fue absuelto y ha reconocido que para ella contra cualquier tipo de violencia hay tolerancia cero, un incómodo momento que ha dejado patente a tensa relación que existe entre ellos.