Nerviosa, emocionada y con los ojos llorosos entraba Terelu Campos en el plató de 'Sábado Deluxe' por primera vez tras su última intervención. Los colaboradores y los espectadores allí presentes la recibieron con un gran aplauso que provocó su llanto: "Perdonar. Es que no sabía cuando iba a volver a pisar este plató. Con todos los sinsabores que da eh".
Jorge Javier Vázquez fue el encargado de iniciar la entrevista. El presentador se sentó junto a su compañera, que habló sobre su recuperación: "¿Tu sabes lo que es llevar casi dos meses sin apoyar la espalda?. Me hacía una fortaleza en el sofá con los cojines". Ante la pregunta de si se había recuperado anímicamente, la colaboradora negó rotundamente: "Todavía no, estoy en proceso. Pero no me estoy tratando ni nada ".
Jorge Javier Vázquez le preguntó si tenía miedo al bajón, a lo que ella respondió que ya lo había tenido: " En un momento dado dije que quería tirar la toalla. Esa frase fue producto de la desazón, la desesperación, de no entender lo que pasa. El no entender como por esto se te paraliza la vida. No solo la espalda, para una mujer el pecho es algo importante y siempre he dicho que el problema de este cáncer es que va muy unido a lo psicológico".
María Teresa Campos uno de sus bastones de apoyo
Uno de los momentos más emotivos de la entrevista fue cuando Terelu Campos habló de su madre. Al hablar de ella reconoció que nunca la ha dejado ver sus heridas: "Siempre quise que mi madre nunca me viera porque es muy difícil de entender y de asimilar. Yo no quería que mi madre tuviera ese recuerdo".
Altamente emocionada contaba lo que ha sufrido por ella: "Verla detrás de un biombo ha sido muy duro. Con curas de una hora eh. Yo soy madre Jorge y se que si a mi hija le pasara algo sería lo peor de mi vida. Y es mi madre. Yo entiendo como ha podido estar aguantando estoicamente el sufrimiento. Mi madre ha sido mi bastón diario. Estoy segura que ha llorado pero se las ha comido delante de mi".
Terelu Campos reconoce que nunca quiere llorar, y menos delante de ella, pero que había momentos que no podía aguantar: "Ha habido dos momentos que yo recuerdo que me metí en el coche y no lloraba, gritaba. Gritaba llorando. Y decía: "¿cómo le estoy haciendo esto a mi madre?", pero no me podía controlar". Momentos difíciles y duros que, por suerte, la colaboradora ha superado con creces.