"No es que te veas gorda, gorda, yo simplemente quería estar más delgada. Si escuchas a tus amigas decir 'qué gorda estoy' y tú tienes cinco kilos más que ellas dices 'madre mía, cómo tengo que estar yo'. Al final esta sociedad te enseña que para estar bien tienes que tener un cuerpo perfecto y eso no es normal", ha empezado explicando antes de comentar que el factor psicológico es lo más determinante.
"Yo todo lo que me decía ese psicópata malo enfermo lo tenía que hacer. Cuando salgo de allí no sé tomar decisiones por mí misma. Entonces cuando no comes te creas como un poder, adelgazas, mandas en tu cuerpo, notas un cambio que consigues tú y tienes unos resultados. Todo eso te engorda el ego y te hace sentir poderosa. Como yo, aparte, había recibido tantas palizas, llegué a un punto de mi vida que una parte de mí necesitaba automaltratarse y lo hacía no comiendo. Necesitaba llevarme al límite porque creía que el problema lo tenía yo y tenía que pegarme porque creía que me lo merecía. Era una espiral asquerosa y a mí eso me enganchó como una droga, a lo que sumas que como estás más delgada te ves más guapa porque estás más delgada y más todo", ha contado.
Steisy: "Necesitaba llevarme al límite"
Esas palabras produjeron el efecto deseado: "Me dio una hostia de realidad. Yo sé que me levanté al día siguiente y le dije a mi madre que me pusiera el desayuno". Tras contar este desgarrador testimonio, Steisy ha querido dejar muy claro que la persona enferma es la única que verdaderamente tiene que dar el paso para curarse, dando algunos consejos: "Tú te estás matando poco a poco. Los familiares que están al lado de estas personas, prohibido hablar de comida. Si el mundo es la comida más asco y más ansiedad le pilla a la comida. Tenéis que ir al médico para que, aunque sea a base de mentiras, a la hora de comer algo poder prepararlo de una manera que puedas meter más nutrientes en ese cuerpo. Y mucho psicólogo y mucha suerte".