Después de que Violeta Mangriñán decidiera contar públicamente su recaída en la anorexia, Steisy ha decidido también emplear su canal de Mtmad para hablar de este problema alimentario que ella también padeció en el pasado. La extronista ha explicado que, en esta enfermedad, "no sabes el momento exacto en el que empieza porque como va tan despacio, cuando quieres cortar ya estás ahí metida. Desde que empiezas a jugar con la comida tienes un problema ". Lo que sí sabe es que comenzó a los "18 años, cuando salí del maltrato".
"No es que te veas gorda, gorda, yo simplemente quería estar más delgada. Si escuchas a tus amigas decir 'qué gorda estoy' y tú tienes cinco kilos más que ellas dices 'madre mía, cómo tengo que estar yo'. Al final esta sociedad te enseña que para estar bien tienes que tener un cuerpo perfecto y eso no es normal ", ha empezado explicando antes de comentar que el factor psicológico es lo más determinante.
" Yo todo lo que me decía ese psicópata malo enfermo lo tenía que hacer. Cuando salgo de allí no sé tomar decisiones por mí misma. Entonces cuando no comes te creas como un poder, adelgazas, mandas en tu cuerpo, notas un cambio que consigues tú y tienes unos resultados. Todo eso te engorda el ego y te hace sentir poderosa. Como yo, aparte, había recibido tantas palizas, llegué a un punto de mi vida que una parte de mí necesitaba automaltratarse y lo hacía no comiendo. Necesitaba llevarme al límite porque creía que el problema lo tenía yo y tenía que pegarme porque creía que me lo merecía. Era una espiral asquerosa y a mí eso me enganchó como una droga, a lo que sumas que como estás más delgada te ves más guapa porque estás más delgada y más todo", ha contado.
Steisy: "Necesitaba llevarme al límite"
Una vivencia desgarradora que llegó a Steisy a pesar 43 kilos: " La talla 34 me estaba grande. Era tremendo, adelgazaba como la espuma. Cuando mi madre descubrió que era un saco de huesos empezó a chillar y empezó a llorar. Ahora me río pero de los nervios no se le ocurrió otra cosa que sacarme al pasillo, delante de la amiga con la que estaba, y se lió a darme palos. Yo llorando y chillando.. Se montó un percal en mi casa... Mi madre se fue al hospital y le enseñaron cómo dar de comer a una niña que padecía anorexia".
Pero llegó un punto que su madre le dijo que tenía que ponerse en manos de un médico para solucionar el problema, algo a lo que ella se negaba: " Agradecí que fuera duro conmigo. Me metió una terapia de choque y me dijo 'no me pienso creer que comes ni nada porque las anoréxicas sois unas mentirosas. Si tú ahora mismo pesas 43 kilos y no comes, mi deber es ingresante, porque si te dejo que te mueras me busca la ruina'", ha relatado explicando que le dijo cómo le iba a dar de comer a través de una sonda.
Esas palabras produjeron el efecto deseado: "Me dio una hostia de realidad. Yo sé que me levanté al día siguiente y le dije a mi madre que me pusiera el desayuno". Tras contar este desgarrador testimonio, Steisy ha querido dejar muy claro que la persona enferma es la única que verdaderamente tiene que dar el paso para curarse, dando algunos consejos: " Tú te estás matando poco a poco. Los familiares que están al lado de estas personas, prohibido hablar de comida. Si el mundo es la comida más asco y más ansiedad le pilla a la comida. Tenéis que ir al médico para que, aunque sea a base de mentiras, a la hora de comer algo poder prepararlo de una manera que puedas meter más nutrientes en ese cuerpo. Y mucho psicólogo y mucha suerte".