Sofía Suescun y Kiko Jiménez no han dudado en demostrar a todos el amor que se tienen y entre besos, abrazos y lágrimas se han sincerado como nunca.
Ya son muchos días en 'Supervivientes 2024' y algo que se echa mucho en falta es el amor de aquellas personas más especiales y Kiko Jiménez lo sabe bien. El superviviente acudía a la Palapa desorientado y preguntando a Carlos Sobera qué hacía ahí. "Estoy muy nervioso, no sé lo que tramáis", empezaba diciendo.
Por su parte, Sobera decidió desviar la atención y le hizo comentarios sobre el concurso que está haciendo el novio de Sofía Suescun. "Me estoy sorprendiendo a mí mismo. Me encuentro bien, me encuentro pletórico muchas veces me levanto y digo hoy tengo ganas, me encuentro con fuerzas para comerme el día", decía Kiko con una sonrisa. Pero, para introducir el tema, el presentador de 'First Dates' le decía que a veces sí que tenía bajones. "Es normal, y muchos que los tengo y digo no quiero tener bajones porque son casi siempre por lo mismo", se sinceraba entre lágrimas Kiko Jiménez.
"Echo de menos a la gente, a las personas especiales, a los míos", admitía. Y, de repente, llegó un pequeño regalo: un audio de Sofía. En ese momento el superviviente ya no pudo contener más las lágrimas de tristeza y se dejó llevar. Una sorpresa única
Carlos le seguía desviando la atención y le decía que había sido imposible tener allí a la que fuera ganadora de 'Supervivientes 2018'. "La echo mucho de menos", se abría el superviviente. Esta fue la llamada perfecta para que Sofía llegara y ambos se fundieran en un largo abrazo lleno de besos y muchas risas. El concursante no sabía ni que decir. "Estás increíble, mi ratona. Increíble. Estás guapísima", decía su novio, que no encontraba palabras para definir ese reencuentro tan especial. Pero Sofía no se quedaba atrás, ella estaba igual de ilusionada que él por verlo. "Eres de las personas mas fuertes que conozco, no te he visto quejarte en ningún momento, estoy superogullosa de ti amor", reconocía su novia.
Kiko seguía llorando, no podía parar, a la vez que no dejaba de abrazar y mirar a Sofía ni un instante. "Es la mejor sensación que he vivido en mi vida", se confesaba. No obstante, Sofía también le puso los puntos sobre las íes por la broma mala que le hicieron él y Marieta a Torres. "Yo de ti espero que le pidas perdón al menos por ese momento de ansiedad que pasó", le decía la exsuperviviente. "No es de perdedores pedir perdón, es de ganadores", admitía ella.
Estas palabras solo demostraban la enorme complicidad que ambos tenían y no cortaron el momento tan bonito que estaban viviendo. "Me he dado cuenta aquí que eres la mujer de mi vida y quiero todo contigo, quiero que seas la madre de mis hijos, quiero también que nos casemos", sentenciaba entre besos Kiko Jiménez. A esto Sofía admitía con voz temblorosa, pero sin dejar paso a las lágrimas: "Yo soy feliz con él desde el principio, mi amor se ha ido transformando a unos niveles que para mi es una persona superimportante". No obstante, si querían estar juntos esa noche, tendrían que enfrentarse a un reto muy duro: la noria infernal.