Hace más de tres meses que Carmen Sevilla se iba para siempre. Lo hacía de forma discreta por expreso deseo de su hijo. Sin un velatorio público ni un funeral multitudinario. Solamente la familia "con lazos de sangre" y las dos personas que la cuidaron hasta su muerte, explicó en aquel momento su propio hijo, Augusto Algueró. Esto ya generó un gran revuelo por aquel entonces entre el resto de familiares, amigos y compañeros de profesión de la presentadora y actriz, quieres celebraron luego una misa funeral organizada por Rappel para darle el último adiós que creían que se merecía una figura como la de Carmen Sevilla.
Una presunta preocupación por parte de su hijo que también estuvo muy presente en los últimos años de su vida que pasó ingresada en una residencia de Aravaca. Las visitas fueron prácticamente escasas también por decisión de su propio hijo siempre velando por el bienestar de su madre según él mismo aseguró. Esto tampoco gustó a la gente de su entorno. Pero esta sobreprotección de Algueró sobre su madre choca ahora con la última información publicada por Pilar Vidal en ABC asegurando que las cenizas de la presentadora todavía siguen en el sanatorio de Pozuelo en el que fue incinerada 105 días después de su muerte.
Una información que horas más tarde negaba el propio Rappel en boca del propio Augusto Algueró: "Me dijo: ' Yo voy a hacer con las cenizas de mi madre lo que le prometí, y tú sabes que pidió que se hicieran tres urnas para que las depositara en tres lugares que habían sido muy especiales y singulares en su vida'", explicaba el vidente tras poder hablar con el hijo de la que fuera su gran amiga. " Él dice que las cenizas las tiene él. Que no es verdad lo que se ha publicado ", añadía José Manuel Parada tras conocerse la noticia.
En cambio, era una sobrina de Carmen Sevilla y prima de Augusto Algueró la que confirmaba la noticia dada por Pilar Vidal asegurando que ella tenía constancia de que las cenizas de su tía todavía no se habían recogido, al menos cuando ella acudió al tantaorio para recoger ella misma parte de esas renizas con autorización de Algueró: " Las cenizas de mi tía siguen ahí. Yo fui a recoger un relicario porque yo le pedí el favor a mi primo. Cuando yo fui a recogerlas le pregunté a la señora si habían ido a recogerlas y me dijeron que no. Considero que es una aberración que mi tía siga estando allí", aseguró en una conversación con 'Y ahora Sonsoles'.
"Hay muchas cosas de mi primo que no ni comparto ni concibo"
Elena -así se llama la sobrina de Carmen Sevilla- contestaba también conocer las intenciones de su primo sobre qué hacer con los restos mortales de su tía y que habría sido una de las últimas voluntades de la propia actriz antes de sufrir el deterioro del Alzheimer que padecía: " Lo que iba a hacer era llevar parte de las cenizas a Marbella y otra parte, porque tenemos un nicho familiar, a Sevilla ". Una última voluntad que parece que todavía esta por cumplir.
En esta conversación con el programa, la sobrina de la también presentadora aseguraba que tampoco tenía muy buena relación con su primo y que tampoco entendió muy bien la actitud que tuvo para con su madre en sus últimos años: " Con mi primo tampoco tengo una relación muy fluida. Hay muchas cosas de mi primo que no ni comparto ni concibo. Como el funeral. A mí también me ha alejado, Yo soy la propia familia y no estoy en el mundo mediático ", realmente apenada por como esto afectó a su propia familia: "Mi padre se fue sin poder despedirse de su hermana. La pena que tengo... Solamente fui una vez a visitarla. Fui media hora, a las ocho de la tarde cuando mi tía estaba medio dormida. Es que tampoco es una persona, bajo mi punto de vista, muy racional".