Fiama se convirtió en la cuarta expulsada de 'Secret Story' el pasado jueves 7 de octubre. Durante la emisión del programa 'La noche de los secretos' la ex concursante del reality confesó su íntimo secreto y que tanto inquietaba a los espectadores del programa.
Fiama, Jordi González y Sofía Cristo / Foto: Telecinco"Soy fetichista. Robo la ropa interior de mis amantes", desveló la canaria. Unas palabras que sorprendieron a todos los que se encontraban en el plató esa noche. El presentador Jordi González le pidió que explicase que motivó a la que también fue participante de 'La isla de las tentaciones' a robar la ropa interior de sus amantes, Fiama fue muy clara explicando su motivo: "Fue una época, un añito que tuve, cuando tenía 18 añitos, tuve un verano movidito y me apetecía coleccionar los calzoncillos de las personas con las que estaba", reveló la canaria.
Fiama más tarde añadió que aún los conserva en casa de su madre y que tendrá como unos doce. La canaria confesó que cuando los chicos se ponían a buscar su ropa interior ella se hacía la despistada y que se ponía también a 'buscarlos', pero los escondía. El secreto de Fiama revolucionó un poco el plató y varios colaboradores querían saber si esos calzoncillos "pasaban por la lavadora o no", a lo que Fiama contestó: "Si, están lavados y dobladitos".
Fiama y Sofía Cristo se besan / Foto: TelecincoEn el programa 'La noche de los secretos' no solo se comentó el secreto con el que jugaba Fiama. Sofía Cristo y la canaria protagonizaron un pequeño beso por petición del presentador. "Va a ser un piquito porque nuestro primer beso no puede ser así", dijo Sofía, y acto seguido protagonizaron el gran momento. Ambas concursantes mantienen una tensión no resuelta que ya existía antes de entrar a la casa.
El negocio oculto de Steisy
Durante el programa de Telecinco 'La noche de los secretos' Steisy aprovechó la confesión de Fiama para revelar que ella vende su ropa interior por internet. La que fue tronista de 'Mujeres, Hombres y Viceversa' comentó que ha llegado a sacarse bastante dinero por las únicas prendas que ha vendido: "A 400 euros las tengo puestas". Solamente lleva "dos o tres semanas" vendiendo sus bragas usadas, pero asegura que el negocio funciona y que la gente intenta regatearle, cosa que ella se niega porque como dice: "Son las bragas de una famosa".
