A Canales Rivera no le sorprendía la entrada de Cynthia Martínez, la que había sido su amante, en 'Secret Story', aceptando con resignación que tendrían que convivir bajo el mismo techo. Sin desatar una guerra desde el principio, el torero se mostró distante para no hacer daño a su novia que estaría viendo todo por la televisión. En cambio, con el paso de los días y el roce de la convivencia, parece que poco a poco han ido acercando posturas por el bien de ambos. Tal es así que incluso comparten tareas del hogar y el primo de Kiko Rivera acepta las bromas de sus compañeros respecto a Cynthia.
De hecho, el diestro se ha sincerado con otros concursantes -entre los que no se encontraba la tercera en discordia- sobre cómo tenía pensando enfocar su relación con Cynthia Martínez dentro del concurso tras el haber superado ya las primeras semanas: " Cuando os diga lo que tengo pensado, vais a flipar ", advertía sin dejar muy claro si lo que podría ocurrir es algo bueno o, en cambio, algo que podría dinamitar su buen rollo y la paz que a veces reina en la casa.
A pesar de las preguntas de sus compañeros, Canales Rivera prefirió no hablar más de la cuenta estando dentro del concurso porque no le beneficiaría, algo que podría entonces no ser precisamente algo bueno para su compañera. Cabe mencionar, tal y como el propio torero confesó en cuanto puso un pie en la casa, todo el escándalo en torno a su infidelidad estaba puesto en manos de sus abogados, advirtiendo desde el principio que su relación estaría marcada por la justicia independientemente de lo que ocurriese en el concurso.
"Lo que hizo no vale dinero"
Y es que Canales Rivera también se sinceró con sus compañeros sobre cómo le afectó cuando la infidelidad salió a la luz. Entonando el mea culpa por lo que había hecho y que ya no podía negar, aseguró que, como todas las cosas malas, también tienen su parte de aprendizaje: " También saqué una parte de beneficio, que es no hacer nunca más lo que hice por el daño ", decía respecto a cómo se sintió su pareja en aquel momento.
Un sufrimiento que el también sintió y canalizó cómo buenamente pudo: " Tal era el daño que yo sentía que había hecho. Fue un horror ", confesaba: "Me levantaba a la siete de la mañana y me ponía a correr y hacía hasta diecisiete kilómetros porque no quería ir a casa para que no me contaran nada". Un daño que en gran parte, asegura, fue causado por Cynthia Martínez: "Lo que hizo no vale dinero", le esperaba, algo que hacía creer a sus compañeros que el hacha de guerra no estaría tan enterrada como pudiese parecer.