Sandra Pica no lo está pasando nada bien. Tal y como ella misma ha desvelado en varias ocasiones, sufre un constante acoso en redes sociales desde que decidió terminar su relación con Tom Brusse mientras él se encontraba en el concurso, motivo que justificaba su ausencia en las mismas durante los últimos días. La situación se ha vuelto insostenible y la extentadora ha decidido echar el freno a las críticas, preocupando a sus seguidores al compartir una imagen desde el hospital.
Con una vía puesta en el brazo y tumbada sobre la camilla de un hospital, la catalana informaba sobre su estado de salud. " Llevo ingresada desde ayer. Todavía no sabemos lo que tengo pero me están cuidando genial", escribía en un intento de restar importancia a su ingreso hospitalario. Poco después, informaba de las novedades. "Gracias de corazón por todos los mensajes que he recibido. Me ingresaron con un fuerte dolor abdominal en el lado derecho pero todavía no saben qué es lo que me pasa. De momento tengo que seguir aquí algunos días con el tratamiento que he empezado y así descartar una intervención".
Un bajón físico que coincide con la inminente llegada de Tom Brusse a España después de más de tres meses concursando en Honduras. Y es que el pasado lunes 19 de julio los concursantes de 'Supervivientes 2021' decían adiós a la isla que había sido hogar durante tanto tiempo. Todos tienen algún que otro asunto que resolver a su vuelta, pero uno de los más complicados es el cara a cara que deberá enfrentar Sandra Pica con Tom Brusse para darle explicaciones.
La llamada que derrumbó a Tom Brusse
El 8 de julio de 2021 Tom Brusse decidía llamar a la que creía que seguía siendo su novia. Ella, por su parte, aprovechaba la llamada para aclarar en qué punto estaba su relación y anunciar que estaba rehaciendo su vida.
La catalana reconocía que no había sido clara con el francomarroquí cuando se marchó, ya que le creó ciertas ilusiones de volver a empezar la relación cuando en realidad tiene claro que no quiere volver con su exnovio.
Asimismo, le confesaba que hasta que fue a Honduras lo respetó, pero que cuando regresó a España, no era igual y conoció a otra persona. Tom, que no daba crédito a lo que escuchaba, exigía unas explicaciones que, tal y como le aseguraba Sandra, tendrían lugar con el fin del concurso. El esperado momento se acerca y a la catalana le ha podido la presión.