Una edición que llega repleta de cambios. El hecho de que 'se hayan quedado' sin presentador con la marcha de Eva González ha hecho reformular el formato, dándole una vuelta de 180 grados. En esta séptima edición los 15 aspirantes que hayan conseguido el delantal deberán decidir con qué juez participarán, formándose así tres equipos con cinco candidatos: "Vamos a ser coaches de cinco aspirantes cada uno".
Esto hará que la competencia y la rivalidad entre los jueces sea aún mayor. Los rifirrafes entre Pepe Rodríguez y Jordi Cruz serán cosa del pasado. Ahora la competición pasa un plano mayor y Samantha Vallejo-Nágera también entrará a esa pelea: "La competición no solo estará entre los aspirantes, también entre nosotros. Pepe y Jordi se pican mucho y no puedo más con ellos".
"No tenemos que competir con cocineros como Pepe y Jordi"
Y en cuanto a quién ejercerá de presentador, cada uno tiene un rol: "Pepe sigue siendo un poco el portavoz del jurado como siempre, Jordi ahora hace de locutor y yo soy la que hago comensales. Con lo cual cada uno tiene un papel y lo que es más divertido es el trato directo con el aspirante. Es más dinámico y estamos muy contentos".