Rosa Benito se marcha otra vez de 'Sálvame' por culpa de las querellas de su yerno a Telecinco

Rosa Benito desfilando vestida de novia en la Sálvame Fashion Week 2016

El regreso de Rosa Benito el pasado mes de diciembre fue todo un acontecimiento televisivo. Atrás quedaban sus giras de conciertos con su hija Rosario Mohedano y terminaba un desencuentro con Telecinco precisamente motivado por una disputa de su hija y su yerno. La de Alicante volvía por todo lo alto, y parecía que para quedarse. Ahora parece que no será así.

La revista Lecturas confirma que Rosa Benito abandonará 'Sálvame' tras no llegar a un nuevo acuerdo con la cadena. Al parecer, la condición para que la cuñada de Rocío Jurado regresara es que Rosario Mohedano y su esposo, Andrés Fernández, retiraran las querellas interpuestas contra Mediaset. Benito no lo ha conseguido, y por ello ha perdido su trabajo una vez más.

Chayo Mohedano y Rosa Benito en el coche

Su marcha es inminente, estará hasta el 1 de julio. Ese día dejará de formar parte de la plantilla de 'Sálvame', lo que le reportaba suculentos ingresos para vivir y satisfacer sus deudas con Hacienda. Hace unos días hubo una reunión entre Rosa Benito y los directivos que según la revista terminó muy mal, es por eso que nadie se ha sorprendido por el abandono de la de Alicante, que esperaba seguir con unas condiciones que no han sido tal.

El nuevo adiós a una estrella mediática

Rosa Benito ha sido y es una de las caras más importantes de 'Sálvame' desde su comienzo. Tras vivir a la sombra de su cuñada Rocío Jurado, con la que trabajaba y a la que adoraba, su muerte provocó que la propia Benito se revelara como una estrella mediática que solo se apagó por las querellas de su yerno a Telecinco.

Rosa Benito en la gala de 'Gran Hermano VIP'

En concreto, Andrés Fernández ha demandado a los directores de 'Sálvame', 'El programa de Ana Rosa' y 'Qué tiempo tan feliz'. El asunto es muy grave al ser una querella, por lo que Mediaset despidió a Amador Mohedano y a Rosa Benito en junio de 2015 para presionar a su yerno. No surtió efecto en ese momento y ambos fueron derechos al paro. Tras negociar de nuevo, se logró que la peluquera volviera a la plantilla, pero lamentablemente no ha habido final feliz.