La concursante comenzaba una nueva aventura en Playa Limbo, en la que se encontró con Kiko Jiménez y Laura Matamoros, así como con Lorena Morolote, primera expulsada. Allí los cuatro podrían haber seguido dándolo todo en el concurso pero Rocío Madrid se ha sentido bastante desplazada ante la unión de los otros tres. Rocío Madrid no se ha adaptado a esta nueva playa, a los horarios que los otros tenían fijados y demás y ha sido el blanco de todas las críticas.
A la hora del debate, se podía ver a una Rocío Madrid totalmente apenada, sin ganas de seguir en el programa e incluso llegaba a decir que sus compañeros le habían hecho bullying, una palabra muy importante que a Kiko Jiménez le ha indignado. Sin embargo, cuando la presentadora pedía que acercaran posturas, el concursante solo atinaba a decir que después de eso él iría por su lado con Laura Matamoros y Rocío por otro, por lo que se quedaría sola como le ha venido sucediendo los últimos días.
Adiós al concurso
"Ya está, yo no podía más y tampoco me veía capaz de abandonar por una cuestión de amor propio pero es que a mí esto se me está haciendo bola y si me hubiera quedado creo que no hubiera aguantado más de dos días seguidos, entonces agradezco a todo el mundo que igual me haya apoyado pero estoy feliz de irme, no os podéis imaginar como. Ya está, bien, qué descanso", concluía antes de marcharse.