"En mà ha cambiado algo"
Un motivo por el que, para RocÃito, volver se le hacÃa difÃcil: "No entiendo Chipiona sin mi madre, pero si es verdad que yo voy llenando mi recipiente de vida y cada vez me encuentro con más fuerza para hacer más cosas. Y una de ellas es volver y voy para no dejar de ir". Tal y como recogen las imágenes, la hija de la cantante se acercó a la tumba, depositó unas flores y apenas aguantó un par de segundos delante de la conocida estatua de su madre. Tras esto, se retiró rápidamente al estar sufriendo un ataque de ansiedad por la situación. "Yo solamente miré su cara, le dije que la querÃa, le puse las flores y me fui porque no podÃa estar más tiempo".
Ahora, apenas 24 horas después, lo recordaba en el plató de Telecinco: "He vuelto a mi pueblo. En mà ha cambiado algo. Estoy más tranquila (...) creo que tiene que ver el contacto con mi gente, con la arena, con la brisa... muchas cosas", reconocÃa nada más llegar a junto de Carlota Corredera. Esta visita a Chipiona ha marcado un antes y un después en la vida de RocÃo Carrasco y asà lo reconoce ella misma: "He dado un paso que para mà era impensable porque antes no lo podÃa hacer. No tenÃa la capacidad emocional, porque estaba bloqueada por todo lo que he contado. Mi mente estaba solamente en eso y estaba paralizada. No tenÃa la suficiente fuerza como para enfrentarme a ir al cementerio".
"Quiero comprarme una casa en Chipiona"
El problema, confiesa, nada tenÃa que ver con la muerte de su madre y vacÃo que esta dejó en su vida: "Yo a ella siempre la siento cerca (...) La muerte de mi madre la tengo superada, ese duelo lo he pasado, sé que es ley de vida. Pero esto no significa que yo no me emocione cuando hable de mi madre o yo no llore cuando vaya al cementerio. Pero el hecho de ir allà después de 14 años me ha hecho bien, pero ha sido un momento muy duro. Yo antes no podÃa porque no tenÃa fuerzas. Ahora lo he hecho, pero ha sido un momento muy duro".
Un gran momento que le ha permitido abrir una nueva etapa en su vida. Un nuevo capÃtulo que viene marcado por un nuevo comienzo, el de la segunda parte de la docu-serie, 'En nombre de RocÃo'. "Se lo dije a AnaÃs: 'Quiero ir y quiero empezar habiendo superado eso' que hacÃa tanto tiempo que mi cabeza y mi estado no me permitÃa. Fue muy duro, pero a la vez fue gratificante. Era ir a donde estaba ella, aunque a mà no me hace falta ir al cementerio para estar con ella, ella está conmigo todos los dÃas. Pero querÃa superar esa barrera porque hasta ese momento no tenÃa fuerzas para hacerlo", un momento que la ha cambiado para siempre: "A mà me ha servido mucho y me sentà triste en un primer momento, pero luego me sentà amplia, llena por no tener ese lÃmite. Me sentà con fuerza, un pasito más que hemos dado". Un pasito que le ha hecho reconectar con su segunda casa: "Yo me traje el recipiente de las vidas arriba de todo. Voy a volver pronto y quiero comprarme una casa allÃ", se sinceraba.