A través de este texto denuncian que desde la emisión del primer capítulo a Rocío Carrasco se la volvió "a victimizar automáticamente" y fue atacada "con el argumento de que lo hacía por dinero", llegando a hablarse de "cifras escandalosas" con el único fin de cuestionar "su credibilidad". Unas cifras que nada tenían que ver con la realidad, pero que, en cambio, fueron reproducidas durante días por diferentes medios de comunicación "incluso cuando había sido desmentida oficialmente".
Dejando claro que todo lo que se había dicho era totalmente falso, también han querido apuntar que lo único que pidió la exmujer de Antonio David Flores cuando ofreció su testimonio era "que ideáramos algún formato en el que pudiera explicarse con libertad y sin ser interrumpida ni juzgada". Esta era una idea que había estado rondado su cabeza durante más de un año y que se lo habían recomendado "como parte del tratamiento el equipo de psicoterapeutras que la trata desde hace tiempo". "A través de este trabajo conjunto Rocío pudo por fin expresar todas sus emociones, contradicciones y sentimientos sin tener miedo", y aseguran que "esta catarsis está siendo realmente liberadora para ella" tal y como ha confirmado el equipo médico que trata a Rocío Carrasco.
"Consideramos que Rocío tenía que recibir una contraprestación"
Para terminar, los productores aseguran que la cantidad de dinero ofrecida a Rocío Carrasco por su testimonio nunca fue "cuestionada" ni "negociada" ni "comentada" ni por ella ni por nadie del propio entorno, por lo que esta seguirá formando parte de su intimidad sin formar parte de ninguna forma de la propia opinión que genere esta serie documental. "Rocío solo nos pidió que se la escuchara", terminaban así el comunicado.