Después de la polémica que despertaron los comentarios de Revilla sobre el banquete de la boda, la Casa Real le invitó al poco tiempo a una nuevo comida. Según ha contado, la comida no fue muy allá e incluso José Luis Rodríguez Zapatero, uno de los presentes, le dijo que podría haber llevado unas anchoas del Cantábrico con mucho humor. Cuando el Rey Juan Carlos le pidió opinión sobre dicha comida, a lo que él contestó, para no meter la pata: "Un 10 Majestad, de ahora en adelante siempre un 10", no obstante, ahora lo cuenta añadiendo un 'a tomar por saco' porque no quería liarla más.
Una de las confesiones que ha hecho en relación a la comida de la boda Real es que en dicha segunda comida a la que acudieron varios dirigentes políticos, tuvo la oportunidad de hablar con el rey del banquete del enlace, y le dijo prácticamente al oido: "Tienes razón Revilla, qué mal nos dieron de comer".
Por otro lado, remontándose al memorable momento de la boda, añadió: "Acostumbrado a las bodas de Cantabria, pensaba que en una boda de tanto troneo iba a ser fuerte", y es que el menú nupcial no fue como él se esperaba. Miguel Ángel Revilla reconoció en su charla con Bertín Osborne en 'Mi casa es la tuya' que al día siguiente de la boda de Felipe y Letizia cometió el error de relatar el convite en un programa cántabro. Alucinado, aún recuerda que se reservó en el cóctel esperando grandes y abundantes platos, pero que le sirvieron una tartaleta diminuta, pularda en salsa y de postre un bombón. Él cree que no criticó a nadie, pero la cosa se le fue de las manos.
Nuevas confesiones
Y si la boda de Felipe y Letizia fue su momento más duro, el más doloroso fue el escribirle una carta a la que no obtuvo respuesta a Sonsoles, la mujer de José Luis Rodríguez Zapatero. Según explica el presidente de Cantabria, trataba de convencer a Zapatero para que pasara las vacaciones de verano en su región, pero éste le envió a que convenciera a su mujer. "En las vacaciones yo no pinto nada", le confesó el de Valladolid, y le escribió una carta que según Revilla era preciosa, no obstante, no consiguió respuesta.