Así que, convertida en el centro de todas las burlas y críticas, Cervantes decidió apartarse del foco público "un poco obligada", según Emma García. "No era dejar la profesión a la que me dediqué tanto tiempo, pero una tiene que saber cuando dar un paso atrás", aseguraba la entrevistada. Así que de aquel duro golpe mediático decidió hacer precisamente su nueva profesión y, consecuentemente, su reinvención: "Decidí reconducir aquella situación tratando de conocer la vida digital, conocer las redes sociales y para ello lo primero era ponerme a estudiar". Y fue así como montó una empresa para intentar ayuda a otros compañeros de profesión que pasen por lo mismo: "Me saqué el acceso universitario, ponerme a estudiar y montar una empresa para tratar de ayudar a otros compañeros que les pueda pasar algo de eso".
Mario, el joven que concursaba: "Ahora se vive con risas"
Para sorpresa de Remedios Cervantes, el programa se había puesto en contacto con Mario, el joven que por aquel entonces tenía 21 años y había perdido los últimos 5.000 euros de su premio. "Yo creo que como vivimos en un mundo de redes sociales, se hizo viral muy rápido", aseguró que fue el problema real de lo ocurrido. A él no le afectó mucho ya que simplemente le conocían en su Salamanca natal pero poco más: "Mi parte fue la mejor y Remedios se llevó la peor". Con el tiempo de por medio asegura que a día de hoy no es más que algo anecdótico de su pasado y que "se vive con risas". Para él aquel hecho fue la oportunidad perfecta para hacer escarnio de una persona famosa: "Yo creo que se le ha dado más morbo por otras cosas que por lo ocurrido", y asegura: "En este mudo no se puede vivir un error".