"Si me permites déjame digerir un poquito lo que he visto, creo que además es lo sensato, lo correcto, pero sobre todo lo mejor", decía después de ver un vídeo que recopilaba los momentos de mayor tensión entre su hija y su hermana. Emma García llenaba su silencio asegurando que había sido "un desencuentro que no esperábamos ninguno de los que estábamos aquí". Pero la presentadora no solo hacía referencia a lo que todo el mundo pudo ver a través de la pequeña pantalla, sino a lo que también ocurrió detrás de las cámaras en varias publicidades y que se había hecho público a través de la revista Semana.
Según un testigo de lo ocurrido, Alejandra Rubio le había propinado a su tía duras frases como "Qué puta cara dura tía esa tía, chaval", "No me vuelvas a hablar en tu puta vida" e incluso llegó a acusar a su tía de ser la que acabó con la carrera profesional de María Teresa Campos. A su vez, esta tampoco se quedó callada y llegó a decirle a su sobrina que "no te voy a permitir más que enfrentes a mi madre y a mi hermana, niñata".
"No hay ganadores y perdedores en esto"
Más allá de esto, la hija de María Teresa Campos prefirió no entrar en opiniones sobre el conflicto familiar rogando la comprensión de sus compañeros ante la complicada tesitura en la que se encuentra. Terelu solo aseguró que quiere que esto "acabe de una vez por que no beneficia a nadie" ya que no beneficia a nadie, ni a ellas dos ni al resto de la familia. Tras esto, simplemente lanzó un mensaje a su hermana y su hija mirando directamente a cámara: "Está en vuestras manos. En las de las dos. Ni en las mías, ni en las de nuestra madre o tu abuela, ni en las de Emma, ni en las de dirección ni en las de los compañeros, ni en ningún otro" y sentenciaba dejando clara su opinión sin decirla directamente: "Al final perdemos todos. No hay ganadores y perdedores en esto".