El programa abrió un nuevo episodio mostrando detalles de un teatro y haciendo una presentación metonímica del protagonista y entrevistado de la noche: Raphael. Un fundido a negro y la aparición apoteósica de Raphael por el foro pusieron el momento álgido a un pequeño montaje de presentación previa a la entrevista.
De repente, un cambio radical. Susanna Griso aparecía haciendo su maleta para trasladarse durante dos días y una noche a la casa que el cantante tiene en una lujosa urbanización a las afueras de Madrid junto a su mujer Natalia Figueroa. En un todoterreno de gama alta, la periodista se presentó allí justo el día antes de uno de sus conciertos en Valencia.
Tanteando el terreno
Al entrar en la mansión del cantante, Griso se quedó sorprendida con el ascensor que había dentro de la casa. Raphael le explicó que tuvieron que instalarlo a causa del transplante que tuvo. "Ahora ya no lo necesito, pero lo sigo usando" dijo Raphael.
Se sentaron en su despacho y Susanna Griso empezó poco a poco ganándose la confianza de Raphael con preguntas de lo más personal, como alguna sobre su condición de abuelo, para después llegar a un tema más candente: su relación con Julio Iglesias. Los rumores de rivalidad siempre han estado ahí pero Raphael se encargó de aclararlo todo: "Con él nunca ha habido ningún problema. Nada de nada".
Su hijo, Manuel Martos
Todo el programa estuvo subrayado por una banda sonora que corrió a cargo de Raphael, él mismo eligió todas y cada una de las canciones que sonaron en el programa. 'Gracias a la vida' de Mercedes Sosa anunció la llegada de Manuel Martos, el tercer hijo de Raphael y su actual productor musical con el que Griso estuvo charlando en la sobremesa de la comida.
"Mis padres nunca han sido autoritarios con nosotros. Siempre han sido muy cariñosos", dijo Manuel Martos admitiendo gran admiración hacia su padre. Manuel Martos está casado con Amelia Bono, hija del expresidente del Congreso José Bono. Raphael y Natalia tienen dos hijos más: Jacobo, director de la serie 'Allí abajo', separado de la actriz Toni Acosta; y Alejandra, casada con Álvaro Arenzana, y madre de dos hijos.
Un paseo revelador
Paseando habló sobre su última película con el director Álex de la Iglesia: "No creo que el cine esté en deuda conmigo. Hice 'Mi gran noche' porque me divertía la idea y me encanta Álex de la Iglesia", explicó Raphael.
También hubo momentos de introspección que Griso consiguió sacar del cantante; primero habló de su amor: "Creo que soy buena persona. Y Natalia se enamoró de mí, no del ídolo de la canción. Cuando cierro la puerta del camerino, eso se acabó. Porque si no, no habría persona que lo aguantara"; después, de uno de sus momentos más duros: "El trasplante fue para mí como si me pusieran un motor nuevo", afirmó Raphael quien admitió que nunca le gustó escucharse. "En la época en que estaba enfermo, empecé a escucharme y a ver cómo cantaba".
Derribando mitos
Una vez llegada la noche, el tema de su mujer volvió a salir. "Natalia es una gran pasión, es una forma de vida; es mi compañera ideal para todo". Admitió haber tenido otros amores, otras novias y sexo sin amor. "Pero cuando me casé, ya no tuve más aventuras de esas". Después Griso le hizo un pequeño obsequio: una batuta para que utilizara en su concierto en Valencia al día siguiente.
A la mañana, entre periódicos y horóscopos admitió no ser supersticioso pero sí una persona muy cuadrada. Después, llegó otro de los momentos más incendiarios del programa. Griso y Raphael charlaron de las especulaciones sobre su condición sexual que siempre le han rodeado.
Afirmó que nunca jugó a la ambigüedad: "Yo no soy nada ambiguo, quien lo quiera ver así, el problema lo tiene él. Hace muchos años paré un concierto en Tarragona porque en aquella época todas las mujeres que se dedicaban a esto eran unas "p..." y los hombres unos mariquitas. Allí, me gritaron eso y yo paré el concierto, bajé del escenario, me di una vuelta y luego, cuando volví al escenario dije: "ya me parecía a mí que había oído mal". Pero eso se ha acabado, afortunadamente".
El programa siguió con su viaje hacia Valencia y los momentos previos al concierto. "Un atleta del escenario" es como Griso acabó describiendo a Raphael. Sin embargo, y a pesar de todo lo que Susanna Griso consiguió sacar de Raphael, ésta nunca dejó de lado su condición de periodista y no llegó a calar tan hondo en el entrevistado como puede hacerlo, por ejemplo, Bertín Osborne con su programa 'En la tuya o en la mía', un formato muy parecido al de Antena 3.