Indecisión, expulsiones sin dilación y hasta ataque de las propias pretendientas ante un inminente descarte. Esta edición de 'Quién quiere casarse con mi hijo' no se queda corta en desvaríos, y es que entre la soberbia de Rosa con David con "te quedes con la que te quedes, te va a quedar muy grande" o la sarna con gusto de Diego con su expulsión de Nuria, en la búsqueda del 'amor' los tróspidos no dejan títere con cabeza.
La exclusividad personificada
El que no parece despertar este interés es David, un chico que no ha dado en el clavo que con sus citas de cruzar un semáforo con los ojos vendados o sentarse en un césped sólo despierta el aburrimiento y el sueño entre sus pretendientas. Fátima rezó a Dios para que le ayudase en este calvario, "yo me duermo, que me cague una paloma y me deje ciega y sorda, porque es que son aburridísimas, aburridísimas".
La homosexualidad, a debate
Sandro y su 'sonrisa míster' adelantaba una intensa relación entre el sevillano y uno de sus pretendientes: "Estoy empezando a sentir cosas", una declaración directa y más que evidente sobre su fiel interés por Vicente, un pretendiente que conocía antes del programa y por el que siempre ha declarado sentir mucho interés. Poco después, su madre -haciéndose de rogar- con un 'Dry Martini' en la mano le contó un 'secretillo' sobre Vicente, un supuesto gusto por la cleptomanía, a lo que él respondió: "Eso que supuestamente le gusta robar, tengo que hablarlo con él y ver que trasfondo hay ahí. Es algo que no entiendo".
Este no fue sólo el único secreto que salió a la luz, ya que su madre también le describió también una divertida anécdota sobre Ra, "una tontería", pues el que parece su segundo pretendiente preferido "por lo visto le tiro con diez años a la madre la ropa interior a la calle".
Por otro lado, con Brian han saltado las chispas, un choque que ha terminado con la expulsión del pretendiente. Precisamente una de las 'perlitas' de la noche fue el desencadenante para este descarte por sentir 'sólo amistad': "Si estoy con una persona gay, me gusta una persona gay, no un macho. Pero, bueno, una cosa no quita a la otra. En fin, que yo me voy por los hilos de búbeda" declaró Brian.
Burlas en un desfile improvisado
Markus y su cita en la piscina ha sido una de las situaciones más comentadas y con más anécdotas a tener en cuenta. Además de demostrar su obsesión por el 'orden' intentando encajar a su gusto las hamacas, el gallego quiso conocer mejor a sus pretendientas 'a lo natural', sin maquillaje.
Entre las propuestas, un desfile en bikini improvisado. "A Lara la vi muy bruta, a Cristina como de fiesta y Sara lo hizo como...", una impresión que no parece haberle disgustado ya que se acerca a su prototipo: "Ella más que nada es un putón familiar". Sin embargo, para las demás pretendientas fue la excusa perfecta para la burla y la carcajada ante la performance de Sarita, a lo que ella respondió: "La pasarela que he hecho yo ha sido mucho más divertida, con más morbo, movimiento del culete, mucho más femenino, más glamuroso, más chica sexy, más todo".