Cuando quedaba 1 mes y 20 días para el gran día de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, la novia se quedaba compuesta y sin vestido. A través e un comunicado, la firma que iba a vestirla para la boda, Sophie et Voilà, anunciaba que "el acuerdo" entre ambas partes "ha tenido que ser resuelto" a consecuencia del "incumplimiento contractual por parte de las señora Falcó" ya que las exigencias y deseos de esta respecto al diseño iban en contra de "nuestra ética empresarial" ya que "pondría en peligro la autoría original del diseño", dejando así entrever unos ánimos de plagio a otro diseñador por parte de la Marquesa de Griñón.
Por si la boda en particular y la relación en general de Tamara e Íñigo Onieva no fuera ya lo suficiente escandalosa, esta nueva piedra en el camino para los novios lo hacía todo mucho más difícil. Las reacciones no se hicieron esperar: la hija de Isabel Preysler rápidamente declaró públicamente que se había enterado de todo por la prensa y negando aferrándose a sus estudios de moda esos supuestos intentos de plagio; sus amigos, algunos diseñadoras como es el caso de Juan Avellaneda, defendían también a la Marquesa de Griñón; el novio se limitaba a replicar las palabras de su futura mujer con un "todo pasa por algo"; y más de una decena de diseñadores, según la propia Tamara Falcó, tanto nacionales como internacionales corrieron raudos y veloces a ofrecer sus diseños para vestirla en su gran día quedando la necesidad de la firma inicial en algo del pasado.
Soioa Goitia y Sofía Arribas, las dos mujeres detrás de Sophie et Voilà | Foto: sophieetvoila.comEn cambio, más allá del comunicado, quienes guardaban silencio eran Sofía Arribas, Directora creativa de la marca; y Soioa Goitia, la CEO. Hasta ahora, que las cámara de Europa Press dieron con la segunda de ellas dos días después de saltar todo por los aires pudiendo así recoger sus primeras declaraciones: " Estoy bien, tranquila ", reconocía al ser preguntada por cómo está llevando todo el revuelo que había generado.
Goitia, precavida ante lo que pueda ocurrir de ahora en adelante, simplemente invitada a la prensa a volver sobre el comunicado: " Reitero cada palabra del comunicado ". Para quitarle hierro al asunto y no mezclar lo profesional con lo personal, la CEO le desea lo mejor a los novios de cara a su gran día reconociendo que "las cosas con Tamara están bien", invitando a que la futura novia encuentre una nueva diseñadora, diseñador o firma para su vestido "cuanto antes mejor".
Adiós al vestido "elegante, rompedor y atemporal"
Atrás quedan aquellas primeras palabras pronunciadas en el mes de febrero cuando se hizo público que sería Sophie et Voilà la marca que vestiría de blanco a Tamara Falcó: " Que alguien como Tamara, que puede tener cualquier vestido de novia del mundo, nos haya elegido a nosotras es un orgullo y un reto brutal ", reconocían a la revista ¡HOLA!: "Para dejar en manos de alguien un vestido tan importante tiene que haber algo muy especial, y la verdad es que lo hubo". Una buena sintonía que duró lo que duró y unas ideas sobre un diseño que acabó manchado de polémica: "Intentamos meter la personalidad dentro del vestido, y justo Tamara tiene un montón (...) El vestido va a ser totalmente ella. Tamara tiene mucha clase, mucho estilo, pero por encima de eso tiene muchísima personalidad. Elegante, rompedor y atemporal ".
