El 'puente de las emociones' ayuda a los supervivientes a hacer un paso por su vida entera. Después de tres meses alejados de los suyos y completamente aislados, los aventureros han tenido muchísimo tiempo de pensar en su presente, en su futuro, pero también en su pasado, haciéndoles recordar muchas emociones.
Emociones que han salido a flote en todos los concursantes, que se han abierto en canal. Unos momentos de confesiones que tienen muy preocupada a Rocío Flores, que considera que a lo mejor tenía que haberse matenido un poco más callada y no haber hablado, en especial, de su madre Rocío Carrasco con frases como "es muy doloroso, el tiempo se ha ido y el tiempo no vuelve".
Al volver a la playa, pensando en lo que había dicho, la joven comentó con Barranco que se sentía "mal": " Me siento mal por haberlo exteriorizado. Vosotros salía de ahí como liberados, yo salgo como acojonada", decía no pudiendo evitar emocionarse.
Rocío Flores: "Me siento mal por haberlo exteriorizado"
"Es una parte de mí que estoy acostumbrada a llevar yo y ahora compartirlo con todo el mundo,... tampoco quiero que mi madre piense que he hecho el concurso hablando de ella ", comentaba la hija de Antonio David Flores, asegurando sentirse "rara".
Al ser preguntada por Jorge Javier Vázquez por ello en la palapa, Rocío Flores ha comentado que cuando aterrizó en Honduras quería mostrarse ella misma y "no que la opinión en casa fuera que he venido aquí a hablar de mi familia o de mis padres. Y el hecho de hacer el puente conllevaba hablar de ciertas cosas y esa era mi angustia, no hacer daño ".