Adara Molinero se ha convertido en la nueva concursante de 'Secret Story' para sustituir a Sofía Cristo tras su expulsión disciplinaria por su enfrentamiento con Miguel Frigenti, quien también ha sido expulsado. En esta entrada en la casa de los secretos sabía que iba a coincidir con Luca Onestini, su excuñado y hermano de Gianmarco, con el que parece que tenderá puentes.
Luca Onestini, pese a sus diferencias, no ha recibido tan mal la llegada de Adara Molinero a la casa, y ha dicho: "Estamos conviviendo como personas maduras, hemos hablado, pasado tiempo juntos. Lo hemos pasado bien, no lo pensaba y ella tampoco lo pensaba", por lo que parece que entre ellos al menos existe cordialidad y que procurarán llevarse bien en el concurso a instancias de lo que arrastren del pasado. Por otro lado, Jorge Javier Vázquez, el presentador, ha querido echar más leña al fuego, preguntando por quién es más guapo, si Luca o Gianmarco, y ella rápidamente contestaba de manera rotunda : "Gianmarco", para sorpresa del susodicho que se encontraba en plató.
Gianmarco Onestini también ha tenido que responder quién le parece la chica más guapa de la casa, diciendo: "¿Qué preguntas me haces? ¿ Tengo que contestar ? Si hay que decir la verdad, entre todas las chicas ella me parece la más guapa. Es lo que pienso", y en cuando a la respuesta que había dado Adara, ha dicho: "Es lo que ella piensa, para mi no hay ninguna competición con mi hermano".
Lo cierto es que a pesar de sus piropos, parece que no hay ocasión a una nueva oportunidad, o al menos es lo que ha expresado el italiano, haciendo hincapié en que ella ya ha rehecho su vida: " Estoy contento por ella de que tenga su nueva ilusión ", una nueva ilusión que quizás no sea real porque todo parece apuntar a que ha roto por enésima vez con Rodri Fuertes.
No ha sido muy bien recibida
Y aunque Luca Onestini no ha recibido de malas maneras a su excuñada, su llegada no ha agradado a todo el mundo del concurso. Algunos se han alegrado mucho de que Adara se quede como compañera, mientras otros, como Fiama, no le ha hecho demasiada gracia, diciendo: "Estoy fascinada, vamos... Esta mañana encima le he dicho que tenía ganas de que se vaya". Los Gemeliers, por su parte, han cantado una canción para definir el momento: "Escándalo, es un escándalo".