El estilista se ha mostrado muy sincero y emocionado acerca de las palabras que tuvo Cristina Rodríguez cuando le preguntaron por su paso por el programa de Mediaset y sus excompañeros. El influencer comenzaba su discurso de disculpa siendo extremadamente claro: "Cuando me preguntáis que pasó en 'Cámbiame', fue como si yo hubiese tirado una granada". Pelayo Díaz entonó un mea culpa, pero también quiso dar su punto de vista: "Esto ocurrió durante el programa y por eso para mí no fue tan gordo. Aunque nunca lo llegamos a hablar y asumo mi parte de responsabilidad."
"Ojalá en ese momento hubiera tenido la madurez y no hubiese cogido una rabieta, pero vi que se terminaba mi programa y acabó como acabó", dice mirando al pasado con arrepentimiento. El diseñador recuerda esos años como los mejores de su vida y cree que esos últimos malentendidos eclipsaron todo lo bueno. No obstante, también asume que el final de 'Cámbiame' estuvo marcado por constantes ataques propios y ajenos y que a día de hoy, ochos años después, ha cambiado y madurado enormemente.
Un mensaje de reconciliación
Bien es cierto, que también quiso dejar algo claro para que los espectadores no dieran nada por hecho: "Todos los huevos no están en una cesta". El influencer remarcó que su disculpa pública era sincera, pero dejó caer que todos tuvieron parte de culpa y se mostró dolido con las últimas palabras de Cristina Rodríguez: "Dos no se enfadan si uno no quiere y ella abusó un poco de 'sincericidio'. Me dolió que dijera que no me saludaría". Aunque el diseñador también quiso matar dos pájaros de un tiro y recogió las palabras de su excompañera para hacerse autopromoción: "No soy diseñador de Gucci, pero esperad a mayo porque puede que haya sorpresas".