En el tercer capítulo de la sexta temporada de 'La que se avecina' veremos una cara nueva que no pasa habitualmente por 'Mirador de Montepinar'. La Chusa, la problemática e impulsiva exnovia de Coque, vuelve a la carga con motivo de la organización de un mercadillo benéfico.
Sumida en la indigencia y más desquiciada que nunca, Chusa (Paz Padilla) regresará dos años después de intentar reconquistar sin éxito al singular conserje (Nacho Guerreros) del complejo residencial. La exprostituta y toxicómana acudirá a la urbanización interesada en un mercadillo de beneficencia en una trama en la que se verá involucrado Enrique Pastor (José Luis gil).
'Una arqueta, un mercadillo y una ejecución hipotecaria'
Determinado a boicotear el mandato presidencial de Araceli, el mayorista de pescado y marisco planea llevar a cabo una oscura maniobra: atascar las cañerías de la comunidad para provocar así la indignación colectiva de los propietarios de Montepinar.
Su amplio fondo de armario, atesorado en los últimos años, comienza a preocupar a Judith. Ante la falta de espacio en los armarios, la atractiva psicóloga decide desprenderse de algunas de las prendas de su exclusivo guardarropa y montar un mercadillo benéfico, al que acudirá Chusa, la conflictiva y temperamental exnovia de Coque. Mientras la convivencia con su esposo Javi se hace más tensa, Lola se presenta al casting para una nueva serie juvenil, 'Internado Sangriento'.
Por otra parte, Amador y Maite reciben un duro revés cuando llega a su domicilio una carta en la que les notifican la inminente ejecución hipotecaria de su vivienda. Incentivada por Antonio Recio, Nines lleva a cabo su primer cometido: distraer a Coque, quien comienza a sentirse atraído por la joven madre soltera.