La aspirante compartió una publicación en la que decía cosas como estas: "Un día nos dijeron 'esto es un show, no un programa de cocina'. Ha habido amor, ha habido Guerras, yo siempre he sido partidaria del amor y del humor. Y cuando me gritan o no me tratan bien, no lo sé gestionar. Realmente me bloqueé ante tanta presión, (que ya venía bloqueada desde que echaron a Isa), no solo la del cocinado, sino la de toda la gente que tenemos en frente dando órdenes y sobre todo de lo que dirán de nosotros en redes sociales después. Que ya sabéis algunas terribles consecuencias"
Sin embargo, lo más impactante ha sido cuando ha salido a la luz que la publicación había sido editada y que era mucho más fuerte lo que había puesto antes: "Ah, y otra cosa, Jefa, dile a los chicos de las redes del programa (que son maravillosos) que dejen de escribir cosas hirientes sobre mí. Yo hablaba del peligro de las redes, no de salud mental, lo que insinúo es que contratéis algún psicólogo para el programa para que nos explique el por qué de las cosas. 'No estás loco, te han apagado el horno', por ejemplo. 'Pero tranquilo que no van a ser muy duros', decía el texto.
Drogas en 'Masterchef'
Por último, decía: "Me pasan a mí el muerto. Me dijisteis que estuviera graciosa, hiciera chistes y demás, cuando me echasteis tres semanas y no pude rodar 'A todo tren 2' que es lo que quería y así lo hice, mi cocinado era un poco lento pero eficiente, cosas peores las han dado por buenas y además había cambiado la actitud como me dijisteis. Estaba graciosa como querías, poneos de acuerdo. Mi actitud fue guay porque ya no tenía miedo".