' Operación Triunfo 2020 ' se enfrenta a una temporada complicada tras las últimas medidas adoptadas por el Gobierno para poner freno a la pandemia del coronavirus. Tras consultarlo con los nueve triunfitos que todavía permanecen en el concurso, estos han decidido seguir adelante con el talent show y no regresar a sus casas así que, a 24 horas de ocupar el prime time de La 1 de TVE, la dirección tuvo que conseguir levantar una gala que inicialmente iba a ser en el plató sin público y que finalmente tuvo lugar en la academia.
Como si de un pase de micros de los miércoles o lo viernes, los concursantes interpretaron sus temas delante de la bancada de profesores y el enorme espejo pero ataviados con sus looks de gala. Pero en una gala del domingo había alguien que no podía faltar y ese era Roberto Leal. Ante la situación actual en España y el cierre de frontera en Cataluña, al andaluz no le ha quedado otra opción que hacerlo desde su casa en Madrid. Concretamente desde su sofá, aunque se tomó las molestias de no hacerlo en pijama. A pesar de que la gente se lo pidió.
A través de un plasma, Leal intentó conducir la gala de la mejor de las maneras siendo ayudado, en un ocasión tan excepcional como esta, de Noemí Galera. " Te veo aquí que pareces Rajoy ", le decía la directora de la academia. Por supuesto, el andaluz también hizo alarde de su característico sentido del humor: " Nunca me he visto tan cuadrado ". Pero más allá de los fallos que pudo haber por esta complicadas conexiones, Leal supo salir de los problemas del directo bastante airoso. Puede que también ayudase mucho las apariciones estelares que durante toda la noche fue haciendo La Pepa, la archiconocida perra chihuahua de Roberto Leal.
Lo que se escondía detrás de sus conexiones
Pero, aunque lo pareciese, el presentador no estaba solo. Además de la Pepa, su mujer también se encontraba en el salón pero fuera de cámara: " Tengo aquí a mi mujer sentada en un butacón ", decía Leal. Además de ella, también contaba con equipo del programa para que todo marchase lo mejor posible así como dos focos de iluminación, una cámara y un pinganillo con el que contactaba con el equipo del programa. ¿Cómo seguía el programa? Pues viendo La 1 de Televisión Española, como el resto de espectadores.