Pablo Urdangarin ha vuelto a hablar con los medios de comunicación, aunque de una manera escueta, de la situación que se está viviendo en su familia tras conocerse la separación de sus padres, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. Lo cierto es que pese a todo, desea algo junto a sus hermanos, y es volver a ser una familia unida, por eso ha dicho sobre la posible reconciliación de sus padres: "Sí, ojalá. Sería lo normal".
Después de que salieran a la luz unas imágenes en las que su padre aparece paseando de la mano de una mujer que no es su madre, Ainhoa Armentia, las cosas han cambiado mucho en su familia, no obstante, espera que todo evolucione favorablemente a pesar de estas circunstancias que sin ningún lugar a dudas están siendo muy complicadas tanto para él como para sus hermanos.
En cuanto a si su madre viajará hasta Barcelona para estar con él, Pablo Urdangarin ha dicho que no lo sabe, pero es algo que le gustaría que pasara: "Eso no sé, no estoy seguro, ojalá que venga". Su actitud es de cautela, sin dejar al descubierto los planes que tiene la familia para solucionar todo lo que está ocurriendo. Unos días atrás no le importó contestar a una pregunta bastante más comprometida, haciendo referencia a la novia de su padre y el hecho de conocerla, diciendo que ni él ni sus hermanos tienen ningún problema en este sentido: "No sé, si se da la oportunidad, no tengo inconveniente en conocer a Ainhoa Armentia".
Sea como fuere, poco más se sabe sobre cómo evolucionará el divorcio de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, quienes estuvieron aparentemente muy unidos durante el paso del segundo por prisión. Su vida ha dado un giro tremendo, y es que nadie se esperaba que después de haber superado la peor de las adversidades decidieran separar sus caminos sin un comunicado previo.
Tras el escándalo llegó el comunicado
El mensaje de su ruptura llegó poco después de que se filtraran las imágenes de Iñaki Urdangarin con su nueva pareja, haciendo referencia a que seguirían siendo una familia y sin mencionar en ningún momento las palabras divorcio o separación, usando -como ocurrió con la ruptura de la Infanta Elena- eufemismos.