El pasado 22 de septiembre tuvo lugar la tercera gala de 'Gran Hermano 17' y con ella llegó la primera expulsión oficial del concurso. Aunque en la casa entraron 17 concursantes, la salida de Cris y Laura solo formaba parte de la fase final del casting y, en palabras de Jordi González cuando el dominicano reclamaba estar en el Contraclub, ellos sólo fueron dos descartes elegidos en la aplicación del programa, no dos expulsados oficiales.
Y es que, como ya anticipó el presentador del debate de 'GH 17' el pasado 18 de septiembre, los tres primeros expulsados de la edición van a formar parte del Contraclub, donde convivirán, de forma paralela a los concursantes, junto a tres asesores expertos en ser primeros expulsados del reality show: Maite Galdeano ('GH 16'), María José Galera ('GH 1') y Amor Romeira ('GH 9'), cuyo nombre fue comunicado minutos antes de la expulsión de esa misma noche.
Conocido el nombre de la tercera consejera, sólo quedaba saber quién sería el primer concursante en ingresar en el Contraclub de entre los cuatro nominados de la semana: Miguel, Meritxell, Pablo y Candelas. Unas primeras nominaciones que llegaban al segundo debate con dos nominados muy destacados para ser expulsados y dos prácticamente salvados. Pero, en el último programa de 'GH: Límite 48 horas', se comunicó que se había producido un sorpasso entre esos dos concursantes con opciones a salir.
Por lo tanto, tanto Pablo como Miguel se encontraban bastante igualados cuando Jorge Javier Vázquez le comunicó a los concursantes que Meritxell y Candelas estaban fuera de peligro y podían volver a la casa. Y es que ni la valenciana ni la catalana alcanzaban el 10% de los votos cuando mostraron los porcentajes a ciegas, dejando la expulsión en cosa de dos.
A solas en la sala de expulsiones, los mayores enemigos que se han forjado en lo que va de edición se quedaron en el duelo final, convencidos ambos de que serían el primer expulsado por la audiencia. Una primera expulsión que es un arma de doble filo ya que, con la existencia del Contraclub, los primeros expulsados tendrán un reducto por el que podrían volver a la casa.
Es por eso que muchos espectadores han estado votando a su favorito para mandarlo al Contraclub, pero, tal y como Jorge Javier Vázquez comunicó en la gala, sólo uno de los tres volverá a la casa, por lo que es una estrategia que no puede salir del todo bien. Una vez cerrados los teléfonos el presentador conectó con Guadalix de la Sierra para comunicar a los concursantes el veredicto del público.
"La audiencia ha decidido que debe abandonar la casa: Pablo", anunció el presentador ante la sorpresa del gallego. "Yo me lo esperaba... Dije voy a ser el primer nominado y expulsado y acerté", dijo el de Zamora al conocer la decisión del público, que sirvió al menos para que los concursantes se abrazaran y se reconciliaran. "No tengo nada en contra tuya y lo sabes", se dijeron.
Pablo, primer expulsado en entrar al Contraclub
A los nervios y emoción de la expulsión se sumó la sorpresa que sintió Pablo al entrar al Contraclub, donde entró y se quedó atónito con el recibimiento de Maite. "¡Pablo! Pablo ¿qué haces aquí? ¡Eres un 'pelaó'! ", le dijo la navarra a lo que el zamorano respondió diciendo "¿qué es eso? Estoy muy nervioso". Intentando zafarse de la exconcursante de 'Gran Hermano 16', Pablo se dirigió al sofá descubriendo con sorpresa la presencia de Amor Romeira y María José Galera.
"Esas tonterías, no. Eres una persona adulta... Esas chorradas de que te va a dar algo, no. Necesitas una tía con dos cojones. Tienes que espabilar un poco que te veo un poco atolondrao", le dijo Maite a Pablo que no daba crédito a la escena en la que se encontraba y no entendía ni que era esa lugar ni que hacía él ahí.
"Esto no significa que no estés expulsado, que lo estás. Significa que tú y los dos siguientes expulsados vais a convivir con tres mujeres que os pueden ayudar mucho ya que ellas también fueron las primeras expulsadas de su edición y os van a asesorar para que aprovechéis esa segunda oportunidad que os va a dar 'Gran Hermano'", le explicó Jorge Javier Vázquez al joven gofrero.
"Yo estoy ahora aquí de coach con una misión bastante óptima y la titularidad que tengo yo no las tienen estás dos, porque yo soy 'la Elegida de Dios' ", dijo la navarra en cuando se calló Jorge Javier Vázquez, a lo que Amor respondió "y yo soy la elegida del cirujano". Después fue el turno de María José y Amor que le ofrecieron la calma y tranquilidad que no encontrará en "la cabra loca de Maite".