Durante una entrevista con Elle DeGeneres, el actor asegura que "cuando nació yo estaba convencido de que se parecía mucho a mí, era un miniyo". Un hecho que le hacía muy feliz. Eso sí, había ciertos detalles que también le hacían parecerse a su madre, por supuesto, "Afortunadamente para ella, cuando abrió los ojos descubrí que había heredado el mismo color azul que tienen los de Katy, algo que me parece perfecto", dice en detrimento de sus ojos marrones.
Pero conforme fueron pasando los días y la pequeña Daisy fue creciendo, el parecido fue cambiando y cada vez tenía menos de su padre. "Empezó a parecerse a mi madre", asegura. Un detalle que, lejos de ser toda una alegría para él, le ha generado cierto desconcierto. "Eso significaba que tengo que ver cómo Katy amamanta a una versión diminuto de mi mamá". Un hecho que, así explicado, suena un tanto extraño.
"Tengo que ver cómo Katy amamanta a una versión diminuto de mi mamá"
Casualmente, el mismo día que el actor decía estas palabras, Katy Perry protagonizaba un vídeo amamantando a su hija y que Jane Fonda compartía en su perfil de Instagram animando a sus seguidores a votar en las próximas elecciones del mes de noviembre en las que saldrá electo el nuevo Presidente de los Estados Unidos. Por si alguien le asaltaba la duda: en el mencionado vídeo no se le puede ver la cara a la pequeña Daisy para sabe si ese parecido con la madre de Orlando Bloom es real o no.