Días después de que saltara la noticia de que Kiko Rivera se había sometido a una reducción de estómago para adelgazar alrededor de 30 kilos, su entorno guarda silencio y no quiere confirmar lo que es una evidencia. El interesado, que hace unos días comentó a sus seguidores que muy pronto tendría una noticia de que dar, tampoco se ha manifestado, aunque sí ha publicado una foto medio de perfil con los dedos pulgares en alto en la que su pérdida de peso es más que manifiesta.
A pesar de la intervención, que se habría realizado por laparoscopia, el Dj continúa cumpliendo con sus compromisos profesionales por toda España y aprovechando su tiempo libre para disfrutar al máximo de su hija Ana y de su mujer Irene Rosales, embarazada del que será el segundo hijo en común de la pareja.Y en cuanto a los detalles de esta operación, Anabel Pantoja no ha querido comentar nada al respecto en 'Sálvame', pero Kiko Matamoros sí ha comentado que se ha puesto una banda gástrica, mientras que una testigo ha comentado por teléfono que junto a él estuvieron la propia Anabel, su mujer Irene Rosales y un amigo que siempre les suele acompañar.
Kiko Rivera estuvo muy acompañado
"Yo a él le vi muy bien. En ningún momento le vi malestar ni nada. El que menos me esperaba que se iba a operar era Kiko. Porque vamos, si te operas por la noche y salir por la mañana ya de viaje... Me parecía muy rápido. Entonces di por hecho que es la que te hacen por la laparoscopia, que te hacen como unas grapas ", ha contado la testigo, añadiendo que, mientras esperaban, el Dj y su mujer estaban en sofás diferentes: "Él con el móvil y ella todo el rato tocándose el pelo".