El 4 de noviembre de 2016 llegaba a Netflix la serie ' The Crown ', que haría un repaso por la vida personal y profesional de la Reina Isabel II desde que se casó con el Duque de Edimburgo en 1947 y su posterior ascenso al trono en 1952. Desde entonces, ni su protagonista ni ningún miembro de la Familia Real británica se había sentido molesta por algo de lo que formaba parte de la trama de la serie hasta que apareció en la historia Diana Spencer. La cuarta temporada estrenada en noviembre de 2020 traía consigo la primera aparición de una jovencísima Emma Corrin interpretando a Lady Di y la introducción en la trama de los problemas que atravesó en sus años de matrimonio con el Príncipe Carlos, entre ellos la bulimia.
Como ocurrió en vida real, la historia de la Princesa de Gales también generó mucho revuelo en los que un día fueron su familia y el asuntó acabó llegando a instancias mayores como el Gobierno británico de por medio. Tras el revuelo generado por estos nuevos capítulos, el Secretario de cultura británico, Oliver Drowden, pidió formalmente a Netflix que se aclarase de forma explícita que la serie se trata de una serie de ficción y que los hechos narrados podrían estar alejados de la realidad de los mismos. Desde el Gobierno de Boris Johnson temen "que una generación de espectadores que no vivieron esos acontecimientos confundan ficción con realidad" y, por ello, consideran necesario que Netflix sea "muy clara" con ello.
Una petición que, para pesar de la Familia Real, ha sido rechazada. En declaraciones para el medio Deadline, Netflix ha aclarado que "siempre hemos presentado 'The Crown' como una obra dramática" y que, por ello, confían en que sus espectadores entiendan "que es una obra de ficción que está basada en general en acontecimientos históricos". Por este mismo motivo, "no tenemos planes (ni le vemos la necesidad) de incluir un aviso", terminaban diciendo.
Pero lo cierto es que no todo el mundo en la serie está del todo de acuerdo con esta decisión por parte de Netflix. Cuando estalló este conflicto, la actriz Helena Bonham Carter, que da vida a la Princesa Margarita en las temporadas tres y cuatro, confesó públicamente que ella también apoyaba la decisión de poner un aviso antes de cada capítulo ya que al tratarse de "una serie dramatizada" esta tenía "la responsabilidad moral" de hacer saber que algunas cosas no había sido exactamente como se cuentan ya que no se trata de una serie documental dramática.
Camilla Parker-Bowles, una fan de 'The Crown'
Por su parte Emerald Fennell, quien da vida a Camilla Parker-Bowles, no pudo ocultar sus temores al conocer que los miembros de la Familia real podría estar viendo la serie y, en especial, la Duquesa de Cornualles. "¡No lo sabía!", se sorprendía durante una entrevista ET Canada asegurando que era algo "estresante". Por este mismo motivo, la actriz ahora solo tiene un único y ferviente deseo: que la propia Camilla apruebe su interpretación en una serie en la que vuelve a cargar con la responsabilidad -y parte de culpa- por ser la tercera en discordia en el matrimonio de Lady Di y el Príncipe Carlos.
Aunque Fennell puede estar tranquila ya que, tal y como ha declarado una fuente cercana para la revista Vanity Fair, la ahora esposa del hijo de la Reina Isabel II tiene "un muy buen sentido del humor" así que su papel en la serie "no le molestará lo más mínimo". Esta también confirmó que, efectivamente, Bowles había sido una seguidora de las anteriores temporada de 'The Crown': "Me imagino que se pondrá a verla con una copita de vino".