La última nominación está pasando factura a la superviviente que, tras un bajón, ha sufrido un ataque de ansiedad mientras buceaba.
Mónica Hoyos está al límite. Después de todos los momentos tensos que ha vivido con Isabel Pantoja, las tormentas que ha sufrido la isla, la falta de comida y su última nominación, ha hecho que la superviviente se venga abajo. Así se lo hacía saber al resto de sus compañeros, mostrando su opinión sobre que el alegato que había hecho para quedarse en la isla había sido un fracaso.
Aunque sus compañeros intentaron restarle importancia, Hoyos siente que las palabras que pronunció pueden jugar en su contra y costarle la expulsión del reality, cosa que le dolería estando tan cerca de la final. Albert Álvarez, que ha demostrado ser el amigo más cercano de la peruana en la isla, intentó animarla llevándola al mar a bucear y a encontrar peces.
Sin embargo lo que pareció una buena idea no resultó serlo. La concursante empezó a encontrarse mal y sin poder respirar bien y Albert tuvo que sacarla del mar tirando de ella hacia un conjunto de rocas. Allí, Hoyos se quitó el traje de neopreno y se puso a llorar desconsoladamente, sin poder evitarlo. Una vez más el deportista se mostró empático con ella y la animó de la mejor manera que supo.
Una nominación muy dura
Mónica Hoyos se enfrenta a la expulsión contra Dakota Tárraga, después de que Albert fuese salvado durante el programa de 'Tierra de nadie' del martes 2 de junio. Esto hace que la peruana este muy nerviosa, ya que ha estado en la misma situación hace poco y fue ella la elegida por la audiencia para que abandonase la isla.