Paz Padilla conectaba en directo con José Antonio León, que estaba en directo con una trabajadora del centro psiquiátrico en el que llevaría varios días ingresada María José Campanario -algo que ella misma se ha encargado de desmentir-, cuando se produjo el suceso.
La periodista no conseguía seguir el hilo de la historia como ella consideraba que debería ser porque sus compañeros o la propia presentadora estaban interrumpiendo de forma constante, por lo que decidió manifestar su enfado aunque no quería hacerlo de forma tan pública.
El enfado de Mila Ximénez
Y es que lo que no sabía (ni quería) es que los espectadores en casa iban a escuchar perfectamente su queja: "¡Qué tarde mierda!", aseguró mientras pedía a sus compañeros que se tranquilizaran puesto que, con el retorno, no conseguían escuchar el testimonio de la trabajadora, que aseguró que María José Campanario tiene ciertos privilegios dentro del centro y que el resto de internos están muy molestos por ello.