Galería: Mila Ximénez, una vida en imágenes
El lunes 30 de abril, los colaboradores de 'Sálvame' y toda su audiencia se quedaba petrificada al despertarse con la portada de la revista Lecturas. Una portada en la que se anunciaba un cara a cara entre Mila Ximénez y Terelu Campos, donde, después de un mes de una disputa que parecía irreconciliable. Sin embargo, ambas firmaron la paz en la portada de una revista que habría sido enemiga de Terelu desde hace ya muchos años.
Después de la respuesta de Terelu a sus compañeros, alegando que, por un lado, quería reconciliarse con la revista a cambio de buen trato para su hija y, por otro, a pesar de haber reconocido la enemistad con Mila Ximénez, realmente pesa más lo bueno, por lo que, para ambas, la escopeta está ya descargada. En cambio, Mila Ximénez, no se cortaba un pelo con las respuestas a sus compañeros. En concreto a Gustavo González y a Antonio Montero, que tacharon a ambas de interesadas con esta reconciliación.
Y, por eso, se defendía con un buen ataque dirigido, primero, a Antonio Montero: "A mí no me renta llevarme mal o bien con Terelu porque yo cobro lo mismo cuando venga. Lo mismo que cuando tú ponías verde a tu mujer en Twitter, que no sé si cobrabrás o no cobraba. Lo del protagonismo, me sobra protagonismo ya en este programa. Lo que no sé es si volverás a venir porque ya te digo que, de momento, no voy a faltar", decía Ximénez. Pero para González, la colaboradora no se quedaba corta: " Gustavo, chaval, te escuché ayer hablar de dignidad, de amor propio. La pregunta es, ¿lo dices tú, que te has hecho varios polis arrastrando a tu familia? ¿Tú, que te has vestido de buzo por la calle para hacer un reportaje?", reprochaba
Los motivos de la entrevista
Para Mila Ximénez, quien esa misma tarde dudaba sobre si seguría trabajando en 'Sálvame', sus compañeros no se alegran nunca cuando otros dos hacen las paces o tienen un éxito profesional. De hecho, argumentaba que, si la reconciliación con Terelu en la revista Lecturas respondía a intereses económicos, nada le importaba a los demás: "Si es por un trabajo para Terelu, ¿Qué narices os importa? ¿Dignidad de qué? Si a vosotros os ofrecieran lo mismo, os iríais arrastrando por la calle para conseguirlo. Y yo he hecho una entrevista a la cara, no he disfrazado a Terelu de gnomo", respondía haciendo una clara alusión a Gustavo González y María Lapiedra.