La nueva entrega de 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition' no ha defraudado, y es que en esta ocasión Nagore Robles, Ivonne Reyes, Ismael Beiro y Mar Segura han vuelto a reunirse, aunque el escenario, esta vez, ha sido la casa de Miguel Temprano, quien se ha tomado muy en serio su papel de anfitrión.
Sin embargo, lo más destacado de la noche no fue el escaso talento culinario del reportero, sino la confesión que por primera vez ha salido a la luz y que, como no podía ser de otra forma, ha revolucionado a los invitados. Y es que según ha declarado Miguel Temprano, él estuvo detrás de las fotografías que en los años 90 escandalizaron al mundo del corazón y cuyos protagonistas fueron Alessandro Lequio y Mar Flores.
Dichas instantáneas fueron tomadas cuando la modelo mantenía públicamente una relación con Fernando Fernández Tapias, aunque a juzgar por las sonrisas de ambos en la cama, parece que su historia no iba demasiado en serio. De hecho, Miguel Temprano ha contado con pelos y señales cómo se gestaron las polémicas fotografías.
"Le preparé la cámara para hacer las fotos de la cama. Ella cayó como una pipiola", ha explicado el también fotógrafo aclarando que contó con la inestimable ayuda del propio Alessandro Lequio. De esta forma, Miguel Temprano ha destapado al colaborador de 'El Programa de AR' asegurando: "Desde aquella historia toqué techo y mi relación personal y profesional acabó ".
No era la primera vez
Ahora bien, lo cierto es que según ha contado el segundo anfitrión de la cuarta edición del espacio de Cuatro, esta no habría sido su primera colaboración profesional con el que fuera pareja de Ana Obregón. Y es que, ante la gran cantidad de negativos que Nagore Robles e Ismael Beiro han encontrado de Lequio en casa del fotógrafo, no han podido evitar preguntarle el porqué.
De esta forma, Miguel Temprano ha confesado haber participado en lo que él mismo ha calificado como "robados pactados" junto al aristócrata italiano durante cerca de seis años. Tal y como además ha confesado Ivonne Reyes, el paparazzi habría llegado incluso a recibir 72000 euros por algunas de estas instantáneas.