También determina que más invitados a la cena en la que ocurrió todo no hablan por miedo a la familia Campos.
Alejandra Rubio es la mujer del momento. Aunque seguramente a ella no le esté gustando tanto. Además de las especulaciones sobre su supuesta relación sentimental con Suso Álvarez, hay un debate aún más que ferviente sobre si llamó "vieja de mierda" a Lydia Lozano o no. Y ante tanta contradicción, ha tenido que intervenir Conchita y hacerle un polígrafo a Miguel Frigenti, testigo del momento en el que la hija de Terelu Campos dijo ta les palabras de la colaboradora a pesar de que esta lo niegue.Y, para sorpresa de mucho, el polígrafo determina que el colaborador dice la verdad y, por lo tanto, Alejandra Rubio pronunció unas palabras tan feas durante aquella cena entre amigos. Pero la cosa no se quedó aquí, sino que había más preguntas que arrojarían más luz sobre esta situación. ¿Hay más gente que ha escuchado este insulto pero se está callando por miedo al poder que tiene la familia Campos? Miguel Frigente cree que sí y Conchita le dio la razón.
Esta afirmación hace que el testigo de los hechos en cuestión asegure que está muy indignado con algunos de los invitados a aquella cena que le confesaron en privado que también escucharon el insulto pero que en los platós de televisión están intentando dejarlo como un mentiroso.
Más gente escuchó el insulto
Pero había una tercera pregunta ante el polígrafo de Conchita: ¿Había contado Miguel Frigenti todo esto para tener más protagonismo en la televisión y ganar más dinero? El protagonista no dudo en responder con un rotundo no y, de nuevo, la máquina le dio la razón. Frigenti asegura que todo lo hizo motivado por su novio que le convenció para que hablase en privado con Jorge Javier Vázquez y negase la información que se estaba dando en el plató de 'Sábado Deluxe'.
El presentador lo invitó a contarlo todo días más tarde 'Sálvame' y fue así como acabó convirtiéndose en el invitado confeso de aquella cena de la discordia sin haberse motivado, en un primer momento, por ganar más dinero u ocupar un asiento en el famoso programa de las tardes de Telecinco.