Uno de los temas que más se esperaba que tratara es el asalto que sufrió en su vivienda con sus dos hijos y su personal de servicio, ya que diez personas armadas y encapuchadas irrumpieron en su hogar, un tremendo susto del que por suerte salieron ilesos, aunque se llevaron todas sus pertenencias, incluso un vehículo que estaba aparcado en la puerta de la vivienda.
La intervención del cantante ha comenzado con sus disculpas por no haber podido ir antes al programa. En cuanto al asalto ha empezado diciendo: "Estábamos ya dormidos en mi casa y los niños estaban haciendo una 'pijamada' con un amiguito. Eran sobre las 20:30 horas y, de repente, me despierta alguien, veo unas caras que no reconozco y estaba encañonado. La banda iba armada con una artillería pesada muy grande y todos encapuchados y con máscaras".
Dicha operación estaba dirigida por mujer, y ha comentado que por suerte no hubo violencia física, quitando que entre los miembros de la banda se empujaron y que a él le insultaron. Asimismo, pudo percibir que los asaltantes no eran profesionales y él procuró mantener la calma. "Bajé revoluciones, les dije '¿qué queréis?' y me dijeron que querían todo lo que pudieran llevarse de valor", ha dicho.
Tras esto él se encargó en llevarles hacia las cajas fuertes, y uno de los jefes del clan supo que era el cantante. "Se quitó la máscara y me dijo 'yo soy tu fan', y me pidió un selfie", ha comentado, algo que le tranquilizó y por lo que pensó que no iba a . Entonces, tuvo la sensación de que "no iba a pasar nada" y le "entró más tranquilidad", a lo que se añadió el hecho de que en los ojos de sus hijos vio que "no había nada de miedo".
Un episodio para olvidar
El balance de lo sucedido es el siguiente: "Una experiencia para olvidar lo antes posible, una experiencia horrible, terrorífica, que no enseña nada, pero tuvimos la suerte de que no nos pasó nada ni a mis hijos, ni a mí, ni a nadie de la casa. Eso es lo importante, y el resto da igual", ha concluido.