Aunque muchos seguidores de 'Gran Hermano' no habrían sabido quién era Ángel Garó de no haber saltado a la palestra televisiva tras sus polémicas imágenes desnudo en el balcón de su casa en mayo de 2017, el humorista ha dejado claro dentro de la casa de Guadalix de la Sierra que cuenta con una larga trayectoria profesional. Habiendo confundido el programa de convivencia con uno de recetas, parece que su único objetivo ha sido ganarse un hueco en el próximo 'Masterchef Celebrity', puesto que ha centrado su concurso en el papel de cocinero dentro de la casa. Comentarios desafortunados y malas compañías le han dado el jaque mate, convirtiéndose en el séptimo expulsado de 'GH VIP 6' en un duelo muy reñido con su enemigo dentro de la casa, Asraf.
Cocinero oficial de 'GH VIP 6'
Parece que entró por la puerta de la casa de 'Gran Hermano' y se hizo íntimo amigo de la cocina, porque no se ha despegado prácticamente de ella en todo el tiempo que ha durado su concurso. Ángel Garó demostró rápidamente a sus compañeros que tiene dotes culinarias, llegando a hacer en alguna ocasión, incluso, recetas tradicionales de su tierra como el gazpachuelo malagueño con el que se metió en el bolsillo a Makoke. Sin embargo, que se convirtiera en dueño y señor de los fogones de Guadalix de la Sierra también conllevó que algunos de sus compañeros y seguidores del programa le tachasen de auténtico dictador, porque hacía y deshacía a su antojo con la simple excusa de que cocinaba para todo el mundo, hasta que se cansó y decidió colgar el delantal.
Cogió el relevo Miriam Saavedra, a pesar de que Mónica Hoyos no estuviera por la labor, mientras que el resto de compañeros llegaron a afirmar en varias ocasiones que la comida que realizaba estaba buena, aunque tuviera dudas como si había que echar sal a la harina a la hora de rebozar algo. Parece que los halagos a Miriam no sentaban nada bien a Ángel, que emprendió una batalla contra la apodada como 'Reina Inca' por los seguidores del programa acusándola de que la comida que hacía provocaba que tuvieran que ir al baño con mucha más frecuencia de lo normal. Al final tanto fue el cántaro a la fuente que Garó acabó volviendo a la cocina, una de las pocas cosas que ha aportado a esta sexta edición de 'GH VIP 6'.
Sin embargo, la cocina también fue el foco de los principales conflictos que Garó ha tenido dentro de la casa, entre ellos con Asraf. Aunque el míster decía no comer carne, lo que obligaba a tener que hacerle otra comida a pesar de que Ángel le instase a comer lo de los demás, se acabó demostrando que si estaba bien arreglada con especias sí la tomaba. Estos hechos desencadenaron poco a poco otros conflictos entre ellos dentro de la casa hasta convertirse en dos auténticos enemigos íntimos. Hasta el último día discutió el humorista con aspectos de la cocina, ya que desencadenó un auténtico enfrentamiento con toda la casa por el gasto de aceite de Asraf para hacer el pan diario, llegando Aurah a decirle que si tan harto estaba de todo saltase la valla del jardín para irse.
Ángel Garó, ¿racista?
"A cantar a Marruecos", "tienes las rodillas negras y yo blancas" o "hazte un kebab, niñato" son algunas de las frases que Ángel Garó le ha dedicado a Asraf en sus discusiones dentro de la casa de 'Gran Hermano VIP 6', sin olvidar tampoco los repetidos "vete a Perú" que en varias ocasiones le ha repetido a Miriam Saavedra, llegando a introducir en una ocasión una variante tan estridente como "zorra, anda ya y vete a Perú". Parece que nadie duda, salvo el propio humorista que tan poca gracia tiene con este tipo de comentarios, que son ofensas racistas que están fuera de lugar. Sin embargo, la dirección del programa no ha corregido este tipo de actitudes del concursante, a pesar de que los seguidores del reality hayan pedido en repetidas ocasiones en las redes sociales su expulsión disciplinaria, aunque este tipo de decisión pertenece al pasado de 'Gran Hermano', cuando no se dudaba un segundo en tomarla en casos similares a este.
En la gala de expulsión Jorge Javier Vázquez estuvo muy duro con Garó, al que le recordó que el programa lo ve mucha gente que se puede sentir ofendida con sus comentarios. A pesar de ello, el humorista no parecía recular y continuaba defendiendo su postura de que no es racista por el hecho de tener muchos amigos extranjeros. El presentador no dudó un segundo en afirmar que racista o no, lo que sí ha quedado claro es que es una persona clasista, recordándole que " estás trabajando con gente como tú, no con chusma ". La reacción de Garó fue afirmar que estaba haciendo un trabajo y que no iba a consentir reprimendas, encerrándose en el baño acto seguido. Este toque de atención de Jorge Javier ha sido el único movimiento por parte de la organización para tratar de parar esta lamentable situación a la que se llegó.
Es innegable que sus comentarios no han sentado bien a buena parte del público, al igual que la pasividad que ha mostrado la organización permitiéndolos. De hecho, en ocasiones han llegado a ocultar vídeos en las galas o resúmenes que solo los espectadores del 24h han visto, como cuando le preguntó a Makoke que si "has visto que en la tele a Miriam se le ve la cara de indígena", respondiendo la ex de Matamoros que "es lo que es". Sin embargo, el enfrentamiento más grave que vivió dentro de la casa sí que lo mostraron, cuando casi llega a las manos con Asraf solo un día después de que su sobrina le recomendase en un audio que le pusieron que comenzase a jugar, pero le salió mal el juego porque seguramente este tipo de actitudes son las que han motivado su expulsión.
El robo de la leche a Verdeliss
Aunque Asraf y Miriam han sido las dos personas con las que más problemas ha tenido dentro de la casa de Guadalix de la Sierra, siendo con ellas con las que ha sacado a la luz su verdadero carácter, también Ángel Garó ha tenido algunos encontronazos con otros compañeros. Verdeliss fue una de las que también tuvo que soportar el genio del humorista, ya que le dejó caer en alguna ocasión los privilegios que tenía por estar embarazada. De hecho, la youtuber reconoció en la gala que en los últimos días en la casa "me sentía muy chiquitita a su lado", reconociéndole que cree que es mejor que esté fuera porque su imagen se estaba deteriorando, a lo que Ángel Garó se limitó a responder que si "¿todo esto por un sorbo de leche?", haciendo clara referencia al robo de leche que protagonizó junto a Makoke. Este último hecho cierra el cúmulo de polémicas protagonizadas por Ángel Garó, cuyo paso por 'GH VIP 6' será recordado por las palabras que ha dedicado a sus diferentes compañeros.
No todo son polémicas
Tampoco puede olvidar nadie el día en que Ángel Garó se convirtió en inmune dentro de la casa y, por consiguiente, ganó el poder de sacar a un concursante de la lista de nominados para meter a otro. Aunque tuvo claro que Darek tenía que cambiarse por Verdeliss, a pesar de que él mismo había nominado a la youtuber minutos antes, este hecho le trajo una larga cola de críticas dentro de la casa, defendiéndose de la peor manera posible: acusando al presentador de haberle prácticamente obligado a nominar sí o sí, a pesar de que existía la opción de no hacer uso de este poder. Las imágenes del confesionario fueron visualizadas en mitad de la siguiente gala, algo que no sentó nada bien al humorista. Esta fue una de las veces, junto a otras, en las que acusó al programa de manipular los vídeos, una excusa habitual de los concursantes de 'Gran Hermano' cuando se ven acorralados.
Más allá de todas las polémicas que Ángel Garó ha protagonizado dentro de la casa de 'Gran Hermano VIP 6', no podemos olvidar los buenos momentos que nos ha regalado. Pertenecen ya a los anales de la historia sus conversaciones mientras duerme, al igual que los insufribles ronquidos que no dejaban pegar ojo a sus compañeros. Sin embargo, uno de los vídeos por excelencia de esta sexta edición del formato de convivencia de famosos es aquel en el que los dormidos y medio sonámbulos Miriam y Ángel se pegan mutuamente con la mano, hasta que la peruana le dice el ya popular "maldito muñeco" que tanta gracia ha hecho a todos los seguidores del programa. Con gestos como estos ha conseguido que los espectadores recordasen al profesional del humor que es, a pesar de que su actitud con ciertos compañeros mientras estaba despierto provocase que perdiera todos los puntos que se ganaba con la audiencia mientras dormía.