La pista del plátano para la cuarta confirmación de 'Supervivientes 2022' ya tiene nombre y apellidos: Marta Peñate. La canaria se embarcará así en una nueva experiencia televisiva, sin duda la más dura de todas las que ha vivido ya, que tampoco son pocas. La ahora prometida de Tony Spina saltó a la fama como concursante de 'Gran Hermano'. Luego reaparecía para participar en 'La isla de las tentaciones' junto a su por aquel entonces novio Lester. Luego volvía a hacerlo en 'La última tentación' tras pasar por 'La casa fuerte' y 'Solo/Sola', donde empezó su relación con el italiano.
Marta Peñate se suma así a los ya confirmados: Nacho Palau, expareja de Miguel Bosé; Kiko Matamoros; y Ainhoa Cantalapiedra, ganadora de 'OT 2'.
Marta Peñate, la mujer de los mil realities
La carrera televisiva de la canaria no es precisamente corta y mucho menos intensa. Saltó a la fama en 'Gran Hermano 16', donde se presentó como una estudiante de periodismo que, como muchos, quería vivir la experiencia única que suponía el reality. Su paso por la casa no fue precisamente discreta por su característica personalidad, no al gusto de todos -ni compañeros ni audiencia-. Tras esto, decidía apartarse de la televisión para terminar sus estudios.
En cambio, volvía la pequeña pantalla años después para seguir participando en realities. En esta ocasión, de la mano de su ahora expareja, Lester, para ponerse a prueba en 'La isla de las tentaciones 2'. Y tanto si lo hicieron. Ella cayó en la tentación con Dani, posterior pareja de Bea Retamal; y él con Patri, cuya relación sigue todavía viento en popa -con sus más y sus menos-.
Tras esto, formó parte de la segunda edición de 'La casa de los secretos', donde siguió descubriendo ante las cámaras los mil perfiles de su personalidad televisiva. Y allí no dejó indiferente a nadie. Tanto, que podo después se instalaba en el pisito de 'Solo/Sola', donde coincidió con Tony Spina y allí surgió el amor. En medio, Marta Peñate volvía a República Dominicana para formar parte de la edición especial 'La última tentación', donde resolvió sus cuentas pendientes siéndole fiel al italiano. Algo que demostró firmeza en la relación, tanto, que se acabaron comprometiendo.