El aún marido de María Lapiedra, Mark Hamilton, es consciente de la situación que atraviesa su matrimonio y estalla.
Aunque se mostraba dispuesto a recuperar su matrimonio con María Lapiedra, Mark Hamilton está atravesando una delicada situación debido a la infidelidad de su mujer con el colaborador de 'Sálvame' Gustavo González y no ha podido reprimir sus verdaderos sentimientos rompiendo a llorar. Se encontraba realizando una sesión de coaching con Cristina Soria en 'Sálvame Diario' cuando el catalán no pudo más y sacó todo lo que había estando reprimiendo hasta entonces."Llevaba muchos días aguantando y no quería llorar. Sé que si empiezo, no voy a parar... Esto no es fácil". Unas palabras de Mark Hamilton ante las que Cristina Soria se ha mostrado muy empática: "No pasa nada porque llores y te rompas. De hecho, eso es lo lógico, lo natural. Tú apostaste por una relación y ahora ha pasado todo esto, pero no es un fracaso ni para ti, ni para María. No has hecho las cosas mal y tu mayor proyecto son tus hijas".
Algunos colaboradores dudan de la veracidad de sus lágrimas, como es el caso de Lydia Lozano. María Patiño, por su parte, cree en las lágrimas de Mark Hamilton, pero no cree que sean por el motivo que dice. La colaboradora ha manifestado que el matrimonio tiene un pacto que le impide hablar libremente: "Tienen una acuerdo desde hace un tiempo como personas que tienen unos hijos y que tuvieron un proyecto en común. Él tiene ganas de hablar y no puede".
Mark Hamilton cada vez es más consciente de su realidad, y ante sus anteriores declaraciones alegando que hará lo posible por recuperar su matrimonio, ha sido claro ante Cristina Soria: "Ya no puedo seguir aferrándome a algo que no existe". Duras declaraciones
María Lapiedra también ha tenido su sesión con Cristina Soria, y en la conversación, con lágrimas en los ojos, confesaba lo siguiente: "Me siento mal porque con Mark he sido muy mala. No debería haberme casado con él... Yo le quería, pero no estaba enamorada. Lo hice porque Gustavo estaba casado y yo no quería quedarme sola. Y también porque ya estaba embarazada de la primera niña". Con ello deja claro que su relación con Mark Hamilton no tiene vuelta de hoja, que hay cariño pero no amor, y que se casó con él estando enamorada de Gustavo González.