La modelo se tendrá que desnudar al final del programa y se está preparando para ello, superando sus complejos.
Marisa Jara, como concursante de 'Desnudas por la vida', se ha enfrentado a la 'pasarela emocional', y será en su actuación final donde ella, junto al resto de sus compañeras, se desnudará, algo que es un auténtico reto. La modelo no ha dudado en mostrar una de las partes de su cuerpo que más le acompleja, en concreto su cicatriz después de haber superado un cáncer de ovario.
"La barriga. Tengo mi cicatriz y muchas veces o se me ha rechazado en algunos trabajos o me han dicho: 'Oye, te podrías poner un poco de láser para quitarte la cicatriz'", ha comenzado diciendo, para añadir: "En realidad, yo no me quiero quitar mi cicatriz", y es que para ella es parte de su historia. La modelo ha contado cómo esta cicatriz también habla de ella, por eso ha seguido contando: "Esta cicatriz ha hecho que yo esté aquí", y entre tantas emociones ha conseguido llorar, es más, algunas de sus compañeras también se han emocionado, como Anabel Pantoja, Laura Matamoros o Samanta Villar. "Para mí eso ha sido la puerta a la vida, por eso yo no me la quiero quitar", ha señalado. El primer cáncer que le detectaron fue en 2018, y era un cáncer de estómago. "Quise ser madre y se dieron cuenta del tumor cuando me hicieron el TAC. Querer dar yo una vida me la dio a mí", ha terminado diciendo.
"La segunda apertura fue la cesárea de mi bebé. Me da mucha vergüenza porque al tener que abrirme tantas veces, tantas inyecciones... ya no soy la de antes, pero...", ha contado entre lágrimas. Y su compañera Samanta Villar le ha brindado todo su apoyo, diciendo: "Marisa, eres mejor que antes, mucho mejor. Me parece muy grave que una persona que ha pasado por lo que ha pasado, le vayan diciendo que por qué no se hace el láser en la cicatriz".Se ha sincerado sobre el cáncer que ha padecido
En cuanto a su experiencia con el cáncer, ha explicado: "Se llama liposarcoma. Se va a las zonas blandas del cuerpo. En 2018 me salió en el estómago y me tuvieron que limpiar. Yo pensaba que desapareció y cuando en marzo me hicieron el TAC me salió también en el ovario. No se sabe si me darán más adelante radiología...". Y aunque para ella es complicado recordar, siente que tiene que hacerlo para ser consciente de todo lo que ha pasado y de que ahora está viva.