"Quiero daros las gracias por la edición de 'Supervivientes que me estáis dando. Me estáis haciendo pasar momento muy buenos. Ojalá siga así", fueron las palabras con las que Jorge Javier quiso dar la bienvenida a esta cuarta gala del reality a sus concursantes, sin saber lo que muy pronto comenzaría a ocurrir. A estas alturas del programa, es evidente que tanto los cambios como los piques en la convivencia salgan a la luz. Y más aún cuando de por medio se encuentran localizaciones como las oscuridades de Laguna Cacao y las maravillas de Playa Paraíso. Aunque nadie se imaginaba que las disputas por estos dos destinos también tendrían los minutos contados.
Prueba del líder, de localizaciones y de recompensa
Para antes de ello, un nuevo reto se dejaba caer por las playas de Honduras, esta vez para elegir localización. Así, sin tener ni el más mínimo conocimiento de que tanto Playa Paraíso como Laguna Cacao fuesen a desaparecer, el equipo d fuego y el equipo de agua se dirigieron a jugar esta prueba. Esta vez, se trataba de una "lucha", en una plataforma ubicada en medio del mar, en la que batiéndose en un duelo a dos debían intentar no caer al agua. Fue el equipo de agua quien, en esta ocasión, logró alzarse vendedor, teniendo el equipo de fuego que sucumbir de nuevo a las tenebrosas aguas de Laguna Cacao. Aunque, definitivamente, esto no fuera a ser así.
Playa Uva: el Lado Oscuro y el Lado Luminoso
Y es que, en el traslado de los concursantes para disputar la prueba del líder, el exconcursante de Gran Hermano consiguió hacerse con un chicle que había tirado en el suelo. Seguramente, un despiste de alguna persona de la organización que Suso supo aprovechar muy bien. Aunque, el motivo por el que de verdad el programa consideró que debía ser sancionado fueron las malas palabras de Suso dirigidas hacia un trabajador de 'Supervivientes', al obligarle éste a vaciar su saco para "registrarle". "Deberás entregar una de las recompensas obtenidas al grupo contrario: la mosquitera", sentenció el presentador algo enfadado.
Con todo este lío solucionado, y tras la expulsión de El Dioni, dieron comienzo las nominaciones. Parecía que en el equipo de agua los votos iban a ser claros. Y es que Mario D'Amico acabó siendo el elegido por sus compañeros, por mayoría absoluta, para subir a la palestra. Por otra parte, y desde el equipo de fuego, Víctor Sandoval seguía resistiéndose a la salvación absoluta, saliendo una vez más como nominado del equipo. De esta forma, y con los dos primeros nombres sobre la mesa, los correspondientes líderes de cada grupo tuvieron que elegir quién tenía que salir nominado directamente, ya desde las nuevas localizaciones. Yola Berrocal eligió a Cristian mientras que Carla se decantó por Mari Carmen.
A partir de entonces, ambos grupos tendrán que vivir su nuevo día a día en Playa Uva, dividida en dos nuevos terrenos. El Lado Luminoso, que guarda un cierto parecido con Playa Paraíso y en el que convivirán esta semana el equipo de agua, y el Lado Oscuro, que bien se aproxima a las expectativas de Laguna Cacao y a cuyas condiciones tendrá que adaptarse el equipo de fuego. Mientras tanto, ninguno de los componentes del equipo podrá pasar al lado contrario de playa, teniendo que hacer su vida sin hablar con ningún miembro del otro grupo y sin poder intercambiarse ningún objeto ni producto. El hecho de infringir las normas provocará una penalización sobre el correspondiente equipo.