Lo hacía tras visitar la que era la casa familiar en Cantabria donde pasaban todos veranos juntos: "Este tema es delicado. Ir a esa casa y verla vacía... Mis primos siempre van a a ser mi vida por mucho que estemos separados. Les voy a querer siempre", arrojando un poco de luz sobre el conflito de su padre con uno de sus hermanos: "Las relaciones entre hermanos, siendo tantos, son difíciles. Creo que mi padre siempre ha sufrido mucho con ese tema".
Ahora, con el estreno de la tercera temporada, la respuesta a ese guante lanzado al resto de los Pombo no se ha hecho esperar, pero la respuesta no fue positiva. Todo ocurre en el primer episodio y mientras María Pombo y el resto de la familia disfrutan de unos días en la casa que la influencer se ha construido junto a la que era la casa familiar, esta recibía un mensaje: "Vais a flipar. Agarraos... Esto no lo vais a poder sacar. Es de caerte para atrás. Me ha desbloqueado para enviar esto", le decía a su hermana Marta, a su madre y a Gaby.
"Había salido la temporada de 'Pombo' en la que yo hablaba de ellos, me emocionaba y tenía la esperanza de que eso les hubiera abierto una rama de sentimientos nuevos de a lo mejor solucionarse o por lo menos tener un acercamiento", reconocía María Pombo. Pero nada más lejos de la realidad: "Las cosas claras: vosotros y nosotros no somos familia. Nada nos une ya desde el lunes. Cómo se os ocurre hacer esto", es el único extracto que se ha emitido de esa carta.
Todo esto ocurría también después de que la familia se reencontrase en el funeral: "En el funeral lo primero que pensé era en que tenía que darle un abrazo a mis primos porque es lo único que necesito en estos momentos. Nuestra abuela se acaba de morir, nada más importante que darse un abrazo o un beso. Fui a darle un beso a una de mis primas y me quitó la cara y me dijo 'no es el día'".
Un gesto de desprecio que llegaba después de años distanciadas y en los que, como también cuenta, su padre había estado distanciado de su madre y de su padre en sus últimos años de vida: "Sabía que mi padre estaba un poco de bajón porque, con todo el tema familiar, tuvo un distanciamiento un poco obligado [con su madre] que nos hacía pensar en todos los años perdidos que tuvimos con ella, que no hubiera disfrutado tanto de nuestros hijos...".
Una carta que parecía cerrar la puerta a cualquier acercamiento entre la familia: "Es una pena inmensa, una tristeza tremenda", reconocía María Pombo sobre esas "palabras muy duras". "Nosotros somos primos, no hemos tenido ningún tipo de problema. Éramos hermanos... Yo nunca querría para Martín y Vega sembrar esa angustia", decía como culpando a su tío de ser quien obligó al distanciamiento entre los primos: "Aunque duele pensar que dejamos atrás a quienes lo fueron todo, también pienso que fuimos infinitamente felices y que cómo somos y quiénes somos gracias a los momentos que vivimos en familia y eso no lo borra una carta".
¿Qué paso entre los Pombo?
Sin abordar de nuevo el origen del problema, María Pombo arrojaba algo de luz: "No hay que hacer negocios ni con hermanos ni con amigos", confirmando así lo que tantas veces se había comentado en las redes sociales y otros espacios de internet. Tal y como aseguran algunos medios como Cuore, el motivo de esta ruptura se produjo precisamente cuando la fama de María Pombo empezó a ser cada vez mayor. Como bien es sabido -porque se ve en la serie documental-, el oficio de 'Papín', el padre de las Pombo, es ser el dueño y gerente de un restaurante en Madrid. Pues bien, este restaurante había sido abierto por él y por uno de sus hermanos. En cambio, cuando empezó a ganar más fama gracias a María Pombo, las cosas empezaron a tensarse entre hermanos. Qué paso, nadie lo sabe, pero lo que sí se sabe es que fue el padre de María Pombo el que se quedó con el restaurante.