Hace mucho tiempo atrás que los colaboradores de 'Sálvame' pasaron desde de ser simples comentaristas de la vida de los famosos a convertirse ellos mismos en el foco de la noticia. Se convirtió, así, en un programa pionero en focalizar la noticia del día a los asuntos privados de sus tertulianos. De esta forma, el espacio se ha convertido en una jungla llena de peligros en la que trabar puede llegar a ser bastante duro.
Más de una vez se ha visto como alguno de los periodistas se levantan de sus sillas y salen, entre lágrimas, del plató. No es ningún secreto que muchos colaboradores lo han pasado realmente mal y ahora una de ellas lo ha confirmado. Se trata de María Patiño, que ha revelado cuáles son las secuelas que le produce acudir cada tarde a uno de los programas estrella de Telecinco.
María Patiño en 'Sálvame' / Telecinco.esLa gallega relató, a modo de experiencia personal, que cada vez que iba al supermercado se sentía observada y sentía miedo de hacer o decir algo incorrecto que pudiera acabar saliendo a la luz y dejarla en mal lugar. " Como meta la pata, van a llamar al programa en directo ", es el pensamiento que se le pasa a Patiño por la cabeza cada vez que hace cualquier actividad cotidiana en público.
Mucha presión
Lo cierto es que los colaboradores de 'Sálvame' están bajo un estrés constante producido por el temor de que en cualquier momento pueda salir algo que los sitúe en la primera plana. Estas últimas semanas, ha sido Terelu Campos la que se ha visto más afectada por los rumores de que mantuvo una actitud déspota y de diva cuando estuvo trabajando en 'Con T de tarde' en Telemadrid. Con el testimonio de Patiño, se ha hecho patente que hay que ser una persona mentalmente fuerte para soportar la presión mediática a la que se ven expuestos todos los que trabajan delante de las cámaras del programa presentado por Jorge Javier Vázquez, Paz Padilla y Carlota Corredera.
María Patiño y Carlota Corredera en la presentación de la colección de retratos de 'Sálvame' por Javier MariscalEsta última ha ratificado la versión de su compañera ya ha dicho que ninguno de ellos estaba bien del todo. " Ya veníamos con cositas de casa y con estos nueve años solo han podido ir a peor. Sed comprensivos con todas las cosas que podamos hacer", rogaba la exdirectora. En más de una ocasión, varios colaboradores han confesado que se sienten afortunados de trabajar en lo que les gusta a cambio de una cantidad de dinero bastante elevada, pero de seguro que más de una vez han llegado a casa pensando aquello de "esto no está pagado" después de una tarde de discusiones en el magazine de más audiencia de la cadena.
