"Fui el primer novio de Isa. Nos conocimos cuando yo tenía 16 años, era un par de años mayor que ella y tuvimos una relación de cuatro o cinco meses. Nos conocimos a través de una red social y me dio su teléfono. Empezamos a hablar por teléfono y luego yo quedé con ella en Madrid y empezamos la relación. El primer paso en la relación lo da ella y yo siempre estoy a la espera de lo que ella va diciéndome porque el problema que teníamos era su familia, que estaba en contra de que ella tuviera novio", decía.
"La primera vez que quedamos fue en el Teatro de La Latina, en Madrid. Ella era más bien tímida, por teléfono se expresaba bien pero en persona no tanto. Isa y yo tuvimos unos seis o siete encuentros y todos fueron aquí en Madrid. Uno de los primeros días que nos vimos ella estaba en el instituto y recuerdo que se sale del recreo y nos vemos ese rato y vuelve. Yo me lo pasaba súper bien con ella, una niña con una energía muy bonita y sobre todo muy inteligente. Ella se las ingeniaba para acabar viéndonos y estar juntos", contaba sobre la manera en que conseguían verse.
Además, ha explicado que él acudió a Cantora en una ocasión: "Yo he ido a Cantora. Fui una tarde que me llevó un familiar mío en coche e Isa, a través del teléfono, me iba indicando. Ella me estaba esperando en un lado estratégico y me subió a su habitación. De ahí ya no me moví. Recuerdo que había gente en la casa y entraba, pero yo estaba ahí de una manera clandestina. No podía hacer ruido ni nadie podía notar que yo estaba allí. Yo llego a la tarde noche y creo que ni dormí siquiera. Pasé la noche entera despierto. Ese día sí mantuvimos relaciones sexuales. Yo me tengo que ir porque se hacía de día y es cuando salto la ventana y me voy".
Una relación abocada al fracaso
"Empezamos una relación clandestina con gente que le hace la coartada, que le ayuda. Todo lo que me contaba era que le habían quitado el móvil, que no la dejaban hablar conmigo, que no podía salir. Todo eran impedimentos y obstáculos. Me decía que era imposible vernos. Me dijo que tenía pensado irse de su casa a casa de una amiga, que estaba harta de que le pusieran normas y creo que a raíz de ese momento es cuando la internan. Recuerdo que tenía un teléfono escondido y lo utilizaba los ratos que podía. Yo siempre he pensado que si la madre y la familia no se hubiera metido tanto en la relación, no hubiera pasado nada. Hubiera sido una relación más", decía.
"Ella temía a la madre, era a la que le tenía más respeto, la tenía un poco ahí con mano dura. Me dio la sensación de que era una mujer un poco autoritaria con su hija. Se refugiaba mucho en su hermano, me decía que era como su mejor amigo, que se lo contaba todo, que era el que la ayudaba con los estudios, con sus cosas, ella quería mucho a su hermano. Cuando la relación avanzó y el hermano vio que la cosa seguía y que iba a más, ella ya tuvo que empezar a mentirle. Tal y como las cosas estaban no me extraña que lo del ginecólogo sucediera porque la familia estaba muy encima de ella y la ha sobreprotegido mucho. Me parece de mal gusto y desagradable. Creo que habría miles de formas para hablarlo con ella de otra manera", decía sobre el incidente.