A raíz de esta situación, Mila Ximénez ha acudido a 'Socialité' por la noche y ha explicado cómo se encuentra: "He pasado un tiempo donde he petado, donde la cabeza me ha dicho si todo esto merece la pena, si este tratamiento... A mí me preguntaron una vez '¿has aceptado la enfermedad?' y dije que había aceptado el tratamiento no la enfermedad. Ahora acepto la enfermedad pero me está costando aceptar el tratamiento porque me veo ahí imágenes de una persona que ha sido muy activa, he hecho la croqueta y ahora me veo que soy otra persona. Creo que soy otra y la tristeza me está jugando una mala pasada", revelaba.
"A mí Alba me dijo una cosa importantísima un día, 'a mí tu cansancio no me importa tanto como tu cabeza' y es verdad que llevo mucho tiempo confinada. Yo salí de la casa de 'GH' que no fue fácil, cuando salí fue el confinamiento, tuve el herpes zoster y luego cuando las cosas parece que iban a la normalidad me diagnosticaron el tumor", explicaba Mila Ximénez. Además, asegura que tampoco sabe cómo afrontar el hecho de que todo el mundo esté preocupado por ella: "Me cuesta compartir mis malos momentos. Lo único que hacen es preguntarme cómo estoy pero mi vida se ha convertido en un diario de explicar que estoy bien, cómo ha ido el tratamiento y yo no sabía de qué hablaba antes con la gente".
"Ahora va todo alrededor de la enfermedad y no me la puedo quitar de la cabeza, pero tengo que remontar como sea, tengo que hacer una vida normal. Tengo muchos miedos, miedo a salir sola, miedo a hacer la compra y no tengo porqué", cuenta. La colaboradora también ha explicado lo enfadada que está con la situación: "Esto que me ha pasado es una gran putada. Creo que tenía edad de descansar, de disfrutar de lo que he conseguido durante tanto tiempo, de lo que he hecho... y haber tenido este parón me ha parecido una jugarreta del destino muy cabrona. Estoy muy cabreada con esto. Lo único que espero es ganarle la batalla sacando fuerzas de donde no tengo".
Afronta una situación complicada
El bajón anímico de Mila Ximénez es delicado y ella misma lo explica: "Cuando me despierto no entiendo por qué me despierto, no entiendo por qué estoy, por qué cuando paso dos semanas bien luego vuelvo a tener otro ciclo y me vengo abajo y a mí vivir así me da muchas vueltas la cabeza. Te voy a decir una barbaridad pero prefiero una vida más corta pero más vida, con más calidad. Y luego esto es muy largo y la gente conmigo no puede estar pendiente de mí y lo están pero a veces ni siquiera digo que voy a ir al hospital. Sé que se me quiere pero no quiero producir pena. No es una gripe que estoy una semana mal que vienen mis amigos y me traen un caldito. Esto tiene un proceso muy largo, de cuánto, no lo sé, menos de dos años no lo creo".
"Tengo que convivir con ello y la gente tiene que seguir con su vida. Cuando a veces me llaman digo que estoy bien y no lo estoy, estoy encerrada en casa y sin ganas de hablar y sin ganas de coger el teléfono. Tengo que reunirme conmigo misma un día y entender que somos dos, mi enfermedad y yo y tenemos que hacer un trato, convivir de la mejor manera posible", revela. Su hija Alba es fundamental, pero está lejos: "Alba sabe mucho más de lo que yo creo, me conoce muy bien. Hace lo que puede pero está donde está. No tiene que preguntarme, sabe que los domingos por ejemplo no tengo ganas de hablar. Ella está pendiente y sabe lo que está sucediendo. Yo estaba muy bien al principio, muy entera, pero claro, me lo tomé como otra cosa más que voy a superar".
Mila Ximénez ha explicado el tema de la Navidad: "A mí lo que me da pereza es el tiempo que voy a tardar en hacer una vida con normalidad. El no irme a ningún sitio es porque yo intento cuidarme ahora. No quiero que por pasar unas navidades yo pueda tener un contagio. Es muy complicado, si yo me ingreso provocaría un problema en mi familia. Ahora no hay que crear problemas. Voy a pasar el 24 sola en casa porque tampoco me voy a encontrar bien físicamente, pensé que no pero si me doy el ciclo el día 21 pues el 24 descansaré. Ha habido algunos 24 que los he pasado en casa. Este va a ser más especial, no lo sé, haremos videollamadas, pero no estoy acostumbrada a no elegir. Esta vez no decido yo, decide mi circunstancia".