El problema es que Makoke asegura que está pasando por dificultades económicas que la imposibilitan hacer frente a quedarse sin muebles puesto que como ella dice "tendría que vivir en el suelo". Además, no entiende con qué fin decide su expareja hacer esto ahora, porque dice que él no tiene casa donde guardarlos y "tendría que quemarlos".
Parece que la ruptura que pretendían llevar a cabo en un principio, basada en el respeto y sin echarse cosas en cara ha pasado a mejor vida. Ahora cada vez que se dedican palabras son para exigirse cosas y recordar los malos momentos vividos: "Me has sido infiel, quieres arruinarme y quitarme los muebles para quemarlos".
Un amor real
Se trata de una relación que ha tardado en salir a la luz, pero que los rumores eran tan fuertes que casi no hacia falta que lo confirmasen: "Hemos esperado cinco meses para hacer pública nuestra relación porque no sabíamos si lo nuestro iba en serio o no y lo que no quiero es engañar a nadie. Estaba hasta las narices de mentir cada vez que me preguntaban por Tony".